Hay quienes también lo definen como ese estado de nerviosismo y de cosquilleo en el estómago cuando se está frente o con la persona amada. Sea como sea, lo cierto es que Efecto Mariposa es más que una amplificación de errores y que un simple cosquilleo, es música y, sin duda, de la buena.
Susana, Frasco y Fredi, han vuelto a la palestra del mundo de la música con su nuevo álbum 40.04, un título que hace referencia a la duración total de las diez canciones que este trío malagueño ha incluído en su último trabajo. Diez canciones y 40.04 minutos que no dejan indiferentes a nadie. Los ocho años que estos tres amigos llevan juntos formando este Efecto Mariposa dejan claro, en este nuevo álbum, que la banda a madurado y que nada se les pone por delante a la hora de elegir que canción incluir y cuál dejar en el cajón de los recuerdos. Desde el pasado 9 de Junio disponemos del que, quizás, es el mejor trabajo de los malagueños desde que iniciaron su andadura allá por el año 2001. No quiero decir con esto que sus discos anteriores no hayan sido buenos pero, como suelo repetir constantemente, la edad y el paso del tiempo en los grupos musicales es semejante a la maceración de un buen vino, cuanto más tiempo en la barrica, mejor sabor deja en el paladar.
Bajo el sello de Efecto Mariposa no podemos dejar de encontrarnos canciones de amor, de esperanza, de desamor, de despedidas, de encuentros. Canciones que nos hablan de historias cercanas, con una grandísima base musical y, por supuesto, cantadas con la fuerza y dulzura de la voz de Susana que, en este disco, si ya se salía en los anteriores, vuelve a superarse a sí misma. Es un verdadero placer para los oídos escuchar su voz mientras nos canta algunas de las diez canciones que componen el tracklist de este 40.04:
Efecto Mariposa 40:04 (2009)
1. Por Quererte
2. Amante
3. Diez Minutos
4. Querencia
5. 1994
6. Melancolia
7. No Puedo
8. Calamidad
9. Indiferente
10. Camino
Llevan un mes copando las ondas de las radios nacionales con el que se ha convertido en su nuevo single “Por Quererte“, un tema en el que una historia de amor en la que todo se convierte en caminos distintos pero que, al final vuelven a cruzarse, lo que viene a ser una relación de esas de te quiero pero no te quiero y, a la vez, no puedo dejarte de querer.
Lo cierto es que es complicado destacar un par de canciones cuando lo que tienes en las manos es un disco redondo pero, a pesar de ello, voy a atreverme y a quedarme con dos temas que, a mi modo de ver, son los mejores (dentro de los mejores…) de este 40.04.
“Siempre queda tu luz
que me espera encendida al final de la calle.
Y es que lo siento,
lo siento, lo siento
cada vez que regreso a ti, cada vez que te pienso,
no te merezco.
Y es que lo siento, eres lo último que quiero olvidar
Regálame otro momento más.
Solo vengo a decirte lo siento”
Así reza el estribillo de “Querencia“, un tema de desamor, de disculpas, de cosas que pasan cuando una relación se acaba pero aún quedan los cimientos que, aún ajados y renqueantes, permanecen en pie tras una historia. Una balada al más puro estilo Efecto Mariposa que no deja indiferente a quien la escucha.
“Pienso, en todo lo que fuí,
y en todo lo que soy, y mereció la pena.
Siento que sólo pude ir en una dirección.
Y pienso, que siempre he estado ahí,
echandole el corazon y que valió la pena.
Siento que sigo estando aquí,
detrás de una cancion”
“Camino“, otro de los temas que con sus minutos contribuyen a este 40.04. Sin duda un tema en el que las intenciones, la ilusión, la lucha, el trabajo, el echarle el resto a algo por lo que luchar, son el lema de una canción que, como dice la propia letra en el estribillo, tiene detrás el trabajo y el alma de Susana, Fredi y Frasco.
Y podría desmembrar, una a una, la totalidad de las canciones pero, no me gusta que me cuente el final de las películas y lo cierto es que, la única manera de que descubras si este 40.04 te produce ese Efecto Mariposa, es que te hagas con él y te dejes llevar por sus canciones. Las conclusiones son aquellos cosquilleos que siente cada uno al poner en marcha un disco y dejarse llevar por los sentimientos que experimenta escuchándolo así que, como hizo Edward Lorenz, pongámonos a experimentar en la búsqueda de un efecto, con alas de mariposa.
Toñy Espada