Álbum: Beat the Devil’s Tattoo
Sello: Vagrant Records
Fecha de publicación: 8 de marzo de 2010
País: Estados Unidos
Más información: web/myspace
Tracklist:
1. Beat The Devil’s Tattoo
2. Conscience Killer
3. Bad Blood
4. War Machine
5. Sweet Feeling
6. Evol
7. Mama Taught Me Better
8. River Styx
9. The Toll
10. Aya
11. Shadow’s Keeper
12. Long Way
13. Half-State
Hace casi una década que apareció B.R.M.C. [Virgin, 2001], la tarjeta de presentación de un trío de San Francisco que tomaba el nombre de la banda de motociclistas que capitaneaba Marlon Brando en ‘Salvaje’ -’The Wild One’, en su versión original-. Venían precedidos de la reputación ganada gracias a una demo de 16 canciones que había recibido excelentes críticas. Noel Gallagher les denominó como su “nuevo grupo favorito”, incluso quiso ficharlos para su sello. Warner también apostó por su contratación, pero acabaron en Virgin.
Sus miras musicales estaban puestas en otro lado. Robert Turner y Peter Hayes, el dúo compositor que sigue dirigiendo la trayectoria de Black Rebel Motorcycle Club, demostraron estar influidos por las bandas británicas de finales de los 80’s y primeros 90’s, como Stone Roses, My Bloody Valentine y, especialmente, Jesus And Mary Chain. Como bien acertó a definirles algún crítico avispado, eran “británicos exiliados en Estados Unidos”.
Con el paso de los años se han labrado una sólida carrera discográfica. Éste es su sexto trabajo en estudio, incluyendo The Effects of 333, un álbum instrumental que únicamente se vendió digitalmente. Y con el paso de los discos, Black Rebel Motorcycle Club han cambiado su estatus al de exiliados británicos en el Sur de Estados Unidos. Ya que, sin renunciar a sus influencias primigenias, han ido acercándose a las raíces del rock estadounidense. Lo demostraron con Howl [RCA, 2005]. Sumergiéndose en el folk, el blues y el country. Un corte radical con lo que habían hecho en sus dos primeras entregas que no terminó de funcionar e imagino que por ello, el grupo optó por volver en Baby’81 [RCA, 2007] a su rock ruidoso.
Sin embargo, esta influencia del country, del blues, del espíritu ‘gospeliano’ del Sur estadounidense ha seguido filtrándose en su rock psicodélico, ruidoso, saturado y siniestro, dando paso a composiciones más propias de Black Rebel Motorcycle Club. Ahora, el Sur se fusiona armoniosamente con el ruido inglés, sin dar lugar grandes contrastes. Las piezas han encajado a la perfección y el resultado es Beat the Devil’s Tatto [Vagrant Records, 2010].
Lo comprobamos desde el inicio, con la canción que da título al disco. Un riff al estilo The Black Keys y una placentera sensación de espiritualidad. La influencia del gospel se puede apreciar en algunos coros, como en los de “Conscience Killer” y “Beat the Devil’s Tattoo“. El folk también queda patente en otras canciones como “The Toll” o “Sweet Feeling“, y el blues en el inicio de “River Styx“. También comprobamos que a su propuesta se han integrado otros instrumentos, como la armónica o el piano que marca el ritmo en “Long Way Down“.
Pero Black Rebel Motorcycle Club no han renunciado a su rock psicodélico, ruidoso, saturado y siniestro. Siguen moviéndose por oscuras cañadas, dominadas por ritmos lentos, desarrollando con paciencia su psicodelia ruidosa y saturada, como en “River Styx“, “Aya“, “Half State“, “War Machine“, “Evol” o “Mama Tough Me Better“.
Valoración: 8
Texto: Carlos A.S.