El nuevo trabajo de Robben Ford, uno de los guitarristas de blues más inspirados y prolíficos de la última década, empieza por un título que le viene al pelo. Un día fue lo que duró la grabación, para la que contó con su formación habitual (Audley Freed, Wes Little, Ricky Peterson y Brian Allen) y en Nashville donde se realizó.
Si en Bringing It Back Home el señor Ford se dedicada sobre todo a realizar versiones ahora la mayor parte del disco se compone de temas originales, excepto un par de reinterpretaciones: Cut You Loose, de James Cotton, y Poor Kelly Blues, de Maceo Merriweather. Green Grass, Rainwater abre el álbum y sienta las bases de lo que vamos a encontrar a lo largo de los siguientes cuarenta minutos: blues, medios tiempos en su mayoría, una banda compacta con algunos momentos de destello y muchos, muchos detalles de elegancia y solos comedidos, pero sugerentes. Especialmente reseñable es el trabajo de Barry Green con el trombón, que insufla esporádicamente un punto orleano que es de agradecer.
Texto: Juan Manuel Vilches