Son ya diez años los que lleva este trío sueco liado con su hard rock con pinceladas de blues y ahora regresan más setenteros aún, pero manteniendo el sonido que llevan practicando desde sus inicios. Este nuevo trabajo ha sido grabado en los estudios que tiene la propia la banda y masterizado por Russ Russell, que habitualmente ha trabajo con sonidos más extremos pero que no se desenvuelve mal en estos terrenos.
Take Me Back Home tiene un comienzo arrollador. Banjo y guitarra se dan la mano en un riff muy acelerado que domina toda la composición. Get Your Game On es el single del álbum y no sin razón. Sencilla, pegadiza y con todos los ingredientes de un buen rock & roll clásico. No puede fallar. Los momentos más cercanos al hard rock son lo que siguen dando los mejores resultados, como en Made Of Gold o Who’s The Blame, mientras que medios tiempos como Slow Drifting Away y Long Road suenan demasiado a unos Allman Brothers vitaminados.
Long Road Made Of Gold es mucho más directo que sus predecesores. Han dejado a un lado estructuras más complejas para centrarse en desarrollar potentes riffs y pegadizos estribillos. Y les ha dado buenos resultados: No es el mejor disco de rock del año, pero desde luego da para unas cuantas escuchas.
Texto: Juan Manuel Vilches