El pasado día 15 Marta Tchai presentó su nuevo álbum, Los amantes, en la sala madrileña El Intruso. Antes de comenzar su directo, se proyectó en una pantalla el videoclip de Ceremonia, el single de este nuevo trabajo de la cantautora, imágenes que muestran una dualidad de blancos y negros, con un toque misterioso y muy cuidado, pero sin alejarse de lo humano que tiene Marta para transmitirnos emociones.
Luego comenzó el concierto y la voz de Marta recorrió durante esa noche de jueves canciones de sus discos anteriores y presentó otras de este último. Con cada tema suyo cuenta algo; tanto sus letras como sus melodías hablan de pequeñas historias que parece que todos hayamos vivido, pero que sólo pueden ser contadas con su voz y su guitarra. Y, por su puesto, con toda su banda, porque a Marta Tchai le acompañan músicos inmensos que esa noche consiguieron crear algo mágico.
Entre otros temas, la banda nos ofreció El hombre menguante o Nada que declarar, canción perteneciente a Movimientos circulares que no tocaron en la gira del disco, pero que Marta decidió regalarnos la noche del pasado jueves. La voz de Marta Tchai se dirige al público llena de naturalidad y, entre canción y canción, demuestra su humor. La banda crea una atmósfera agradable, donde no te importa quedarte a escuchar, a recordar todas esas historias que nos cuentan las canciones. Ceremonia -tema inspirado, al parecer, en Borges– sonó muy diferente a como se presenta en el single, donde tiene un toque más cercano a la electrónica.
Narcisa, Al-Ándalus o Underground fueron otros títulos que se pudieron oír esa noche. Y luego llegó Porqués, divertida y espontánea, perteneciente también a Movimientos circulares. Después Marta ofreció al público un momento más íntimo: ella sola a la guitarra, sin su banda; “solo el amor a veces no es suficiente”, cantaba, y tiene razón, porque si la voz de Marta no lo acompaña nada es suficiente; cualquiera querría quedarse a vivir en sus melodías, por muy tristes o desesperantes que sean las palabras que las acompañan.
En la canción que da título a este último álbum hay un pequeño guiño a Patti Smith, porque para esta cantautora de Badajoz la noche es también para Los amantes. Y es que quizá estas dos mujeres tienen mucho más en común de lo que se puede adivinar a simple vista, ya que son capaces de mostrar su lado más salvaje y su lado más tierno en un mismo concierto, en una misma canción, incluso. Marta sabe ser sexy y sabe ser dulce, sabe acercarse al rock y recordar a la copla, y repasar con sus canciones algunos de los poetas que están en todos nosotros.
Para terminar, tocó Shala lara lala, la cual el público, bastante tímido durante la mayoría del concierto, se animó a corear. Y llegó así el final de la noche, aunque Marta Tchai tiene espectáculo para un rato más, por eso ya tiene anunciadas nuevas fechas en la capital (27 de noviembre en La Boite y 18 de diciembre en Búho Real) y sus nuevas canciones estarán disponibles a partir del día 30 en las principales plataformas digitales.