El electroswing cada vez tiene más adeptos y uno de los puntales del estilo, los franceses Caravan Palace, acaban de editar nuevo disco de título impronunciable , un tercer álbum en el que han continuado la experimentación que siempre les ha caracterizado. Unos días antes de su gira española nos ponemos en contacto con su cantante, Zoé Colotis, que además habla castellano perfectamente.
¿Cómo se os ocurrió poner a vuestro habitual robot de las portadas como caracteres?
Esto tiene su origen en un intercambio de e-mails con nuestro manager. Hemos empezado a utilizar este símbolo para hablar del disco; era una simplificación un poco “geek” pero al final hemos encontrado eso gracioso y hemos pensado que no estaría mal que la gente pudiera darle al disco el nombre que se le antojara.
¿Creéis que será complicado llegar a “Robot Face” a través de búsquedas? por ejemplo a través de spotify
Sí claro puede ser que sea un poco más complicado que con un nombre clásico pero basta con buscar a “Caravan palace” para encontrar fácilmente nuestros tres discos.
Considero que es el disco menos bailable que habéis sacado hasta ahora, ¿el procedimiento para componer ha sido el mismo que en otras ocasiones?
Es una cuestión de punto de vista. Algunas personas nos dicen que es el más bailable de nuestros discos el más “club”. Teníamos la voluntad de asumir nuestro gusto por la música “contemporánea” en general y de explorar en ella todas las formas que nos inspiraban (desde Flume hasta Kendrick Lamar pasando por Daft Punk).
El primer disco era más bien un cross-over jazz-manouche/house, el segundo era más influenciado por los big bands americanos de los años 40 y de la techno alemana minimalista. Bueno en resumidas cuentas variamos los pláceres pero seguimos siempre con la voluntad de que la gente se mueva.
Por otro lado en este disco rapeas más que nunca, ¿a qué crees que es debido?
Es más bien un ejercicio de estilo para divertirse. Hay muchos dobles sentidos en el texto de Wonderland por ejemplo. El rap de Lone Digger es mas un “desafío técnico”, un ejercicio de virtuosidad, pues el flow es muy rápido.
Habéis ampliado vuestra paleta de sonidos con influencias negras (hasta en la nota de prensa comenta que Comics es hip-hop-jazz), ¿habéis investigado estos sonidos para conseguir un disco más variado?
Tenemos curiosidad y gusto por todo tipo de música. El hip hop pertenece a nuestra cultura y escuchamos tanto jazz (swing, blues, etc…) como electro, clásico, pop, rock, world o canciones. No rechazamos ninguna influencia. Es como cocinar. No se mezclan cada vez todos los ingredientes. Escogemos componer la pieza de música con tal influencia o coloración y después hacemos ajustes para equilibrar lo vintage y lo moderno. Un álbum es un poco como un menú hace falta que en él se perciba una identidad, pero la variedad también tiene que formar parte de lo que se propone si no se puede rápidamente volver aburrido tanto para nosotros en el proceso de creación como para el público que nos escucha.
Vuestro vídeos de Lone Digger o Comics se alejan de la estética steampunk que tenían muchos de vuestros vídeos anteriores, ¿por qué el cambio?
No buscamos cambiar radicalmente de estilo, sin embargo naturalmente, de disco en disco evolucionamos como les pasa a muchos artistas. La evolución de nuestros “clips”, de nuestros “visuales” està también vinculada con el estilo y la inspiración que procede de las nuevas personas con las que trabajamos. Les dejamos mucha libertad porque también a nosotros nos gusta que nos sorprendan de vez en cuando.
De todas formas, no pensamos que la carrera de músico consista en producir siempre la misma cosa. Por volver a la metáfora de la cocina, intentamos hacer evolucionar nuestras viejas recetas al mismo tiempo que creamos nuevas.
En tu caso particular, ¿cómo llegaste a este tipo de música?, ¿descubriste primero el swing o la electrónica?
Mis bases son la música clásica y el jazz. Hice 12 años de clarinete (tocaba música de cámara y actuaba en una orquesta armónica). Tuve 5 años de formación de canto lírico y después también tomé clases para cantar jazz.
La música electrónica llego más tarde. Al principio no me apetecía nada. Un día un amigo percusionista me enseñó cómo utilizar una MPC 2000 para divertirme. Montamos un grupo en el que mezclabamos un montón de cosas y disfrutábamos mucho. Empecé a darme cuenta de todas las nuevas posibilidades que todo esto podría traerme en termino de composición. Me compré mi primer ordenador y desde entonces somos muy buenas amigas las máquinas y yo!
¿Recibes o has recibido clases de baile?, ¿lindy-hop, hip-hop, funky?
Sí de lindy hop y de charleston. También lo hizo Antoine Toustou (bailamos juntos en el grupo).
Ahora me gustaría tomar clases de “break dance” pero me falta tiempo.
El pasado verano en Madrid nos impresionó mucho tu manejo del castellano, ¿cómo lo aprendiste?
Mi padre es español de (Córdoba); mi madre es francesa pero su madre era por mitad española. Tengo un poco de familia en Madrid y muchísima en Andalucía donde pasé todas mis vacaciones cuando era pequeña. Intento y ir en cuanto puedo porque echo mucho de menos este lugar. A veces hablamos en español con mis padres y mis hermanos, principalmente para reírnos pero también para pelear y decirnos que nos queremos.