Tal vez he sido demasiado dramático en el párrafo anterior, creando con ello una falsa sensación de banda anti-normas, al más puro estilo Eskorbuto. Las cosas no suelen ser tan radicales y, cada vez es más difícil, y contraproducente, mantenerse al margen de todo. Una lástima. En fin, The Mistake aparentaba una formación encaminada a encontrarse con los terrenos del indie-pop, almenos eso es lo que vaticinaba su anterior Anticongelante; pero la banda parece haber rectificado con la intención de no perder esa esencia con la que se gestaron. Para este 4 relegan al olvido el uso de teclados y retoman las bases punks que tan bien dominan. Pero como suele suceder, es difícil desandar lo andado, y eso es lo que sucede con su sonido: flirtearon con el indie, decidieron no seguir esa línea pop ascendente, y han obtenido un resultado que parece nutrirse de lo mejor de ambos mundos.

15 años de carrera a la espalda y el handicap de vivir fuera de la península no parece suponer un esfuerzo extra, ni un lastre creciente, para una formación que ve con este 4 como ya son, justamente eso, cuatro discos los que tienen en el mercado. Y que vuelvo a repetir: dudo de si sus componentes aprobarían el término “mercado” dentro de una reseña a su último álbum