The Bright. Un grupo compuesto por Miryam Gutiérrez (a la voz y guitarra acústica), y por Aníbal Sánchez (con la guitarra, banjo y mandolina). Acompañados de Juan Marigorta (al bajo y batería). Desde que se dieran a conocer bajo el nombre de Bright baby blues, y con un Ep titulado “Coming back home“, estos chicos han ido dando pasos en firme hasta llegar al lugar en el que se encuentran actualmente.
Firmar con el sello Subterfuge les dio pie para darse conocer a un público mayor, editando un adelanto en forma de Ep y de título homónimo. Tras ello, vino este primer trabajo de larga duración que tan buenos frutos les está dando. “Soundtrack for a winter’s tale“, y exactamente canciones como ‘Losing your way‘ o ‘Coffe & wine (things won’t be like before)‘, desprenden una complejidad absoluta que radican en las letras, escritas y compuestas por ellos, cosa que les aporta más mérito si cabe. La sencillez aparente que atesoran las melodías del track list son una sorpresa cuando arrancan, debido a la extrema complejidad que presentan. La calidez de la voz de Miryam es idónea para acondicionar el espacio vital que requieren las canciones. Calidez que se ve contrastada con los riffs de Aníbal. El más claro ejemplo está en ‘They’ll go away‘, donde la tonalidad vocal femenina se funde con el punteo de la guitarra eléctrica.
Sencillamente magnífico el binomio que es The Bright, toda una apuesta muy a tener en cuenta en un futuro no tan lejano. Miryam Gutiérrez y Aníbal Sánchez lo cuentan en esta interesante entrevista.
De estar tocando por pequeños circuitos de la zona, a tocar en escenarios como el Palacio de los Deportes de Madrid o en festivales de renombre y de público masivo en muy poco tiempo. Además de los premios, como el último entregado por parte de Radio3 ¿Se siente vértigo por encontrarse en una corriente de esta tesitura?
[The Bright]: Para serte sinceros, nos lo estamos tomando todo con bastante calma. A veces te ves en situaciones que hace un par de años te parecían completamente fuera de tu alcance, y por supuesto tratas de disfrutar todas esas oportunidades al máximo. Pero por otro lado somos conscientes de que esto acaba de empezar y nos queda un largo camino por recorrer, y mucho trabajo por hacer. Por cada festival hay cinco o diez conciertos en salas pequeñas, y son tan importantes para nosotros o más que cualquier gran escenario.
Aunque no sois unos neonatos en esto. Si no me equivoco, Miryam ya formaba a los quince años parte de Olwen, grupo de tintes folk-rock. Mientras que Aníbal tiraba por los derroteros más garageros con Lester & The Bangs o con Backliners.
[Aníbal]: Cuando nos conocimos Olwen se estaban disolviendo, y Miryam se planteaba la posibilidad de empezar a hacer cosas por su cuenta. Yo por mi parte acababa de comenzar mi andadura hard-rockera con los Backliners y me recorría los escenarios de León con la Les Paul a la altura de las pelotas y toda la chulería del mundo. Cantaba y tocaba la guitarra. Lo pasábamos de miedo, ella venía a nuestros conciertos y yo la apoyaba con su proyecto en solitario, que acabó transformándose en The Bright. Eran tiempos despreocupados.
[Miryam]: Olwen tuvo una vida muy larga y muchos músicos de León pasaron por esa banda. Por una parte es genial, porque es muy enriquecedor tocar con gente distinta, pero por otro lado yo sentía que necesitaba hacer algo más personal. Ya no escuchaba la misma música que con 14 años, cuando formé Olwen, y quería comenzar desde cero. Aníbal me apoyó mucho desde el principio, y hasta que me arranqué a subirme a un escenario yo sola hubo un periodo de reseteo muy importante, en el que nos juntábamos mucho en casa, y nos dedicábamos simplemente a tocar la guitarra, beber un poco de vino y poner muchos discos.
Y al final… confluyen vuestras corrientes musicales en este proyecto que formáis. La calidez sosegada de Miryam con la electricidad de Aníbal. Un binomio que siempre ha dado unos frutos excelentes. Sino, recordemos “Tapestry”, casi un mano a mano entre Carole King y Gerry Goffin. En este caso es la Gibson acústica con la Fender Jazzmaster como contrapunto.
[The Bright]: Es cierto, con el tiempo hemos creado una dinámica muy interesante entre la voz y la guitarra eléctrica. En muchas canciones ambas llevan lineas solistas y se van intercalando. De hecho, la guitarra acústica en la mayoría de los temas del disco lleva el ritmo en segundo plano, ya que intentamos salirnos en la medida de lo posible del rollo “cantautor acústico”. Queríamos algo un poco más complejo y jugar con diferentes texturas.
Pero vayamos al primer dato que llama la atención. El nombre. Os conocí con “Coming back home” un primerizo EP que firmabais como Bright Baby Blues. ¿Este cambio ha sido por gusto o por cuestiones comerciales?
[Aníbal]: “Bright Baby Blues” era el nombre del proyecto en solitario de Miryam. El nombre se me ocurrió a mí, viene de una canción de Jackson Browne y me parecía que le pegaba mucho, la canción habla de una chica con los ojos claros y tiene ese aire melancólico, además suena muy femenino.
[Miryam]: El caso es que cuando decidimos consolidarnos como dúo, a los dos nos parecía que ese nombre ya no era tan apropiado, y jugando un poco con algunas posibilidades, se me ocurrió “The Bright” y a Aníbal le gustó. El “THE” le añade un matiz más “colectivo”, y el nuevo nombre nos suena muy directo y rotundo, incluso un poco pretencioso, lo cual está bien. Desde luego no hubo motivos comerciales ni nada parecido.
Partiendo de aquel EP, giráis y tocáis de manera más constante, incluso llegamos al punto de inflexión que fue tocar como invitados de Tulsa en Madrid, un trece de Julio del pasado año. Me consta que a raíz de aquel show las cosas cambiaron… a mejor.
[The Bright]: Abrir para Tulsa en El Sol fue una gran oportunidad. Era la primera vez que tocábamos fuera de León, y hacerlo en una sala tan mítica como El Sol es un buen comienzo, desde luego. Recordamos muchas cosas de aquella noche, como lo bien que nos trató el personal de la sala, pese a ser los teloneros notamos un cariño y un respeto que es muy de agradecer. Además la gente de Subterfuge estaba en el concierto, y nos comentaron que les gustó mucho nuestra actuación, así que fue una buena toma de contacto con la que iba a ser nuestra futura discográfica.
Y efectivamente, llega Subterfuge y se interesa por vosotros. Aunque supongo que el sello ya mostró algún tipo de interés por vosotros antes de aquel concierto en El Sol.
[The Bright]: Es cierto, estuvieron allí viendo a Tulsa y después del concierto nos felicitaron y estuvimos hablando un rato con ellos. Además, cuando escucharon la maqueta les encantó, y quizás ahí empezaron a ver claro que teníamos potencial suficiente para grabar buenos discos.
Como primer lanzamiento surge otro EP, esta vez de título homónimo. Contiene cuatro cortes, los cuales ya formaron parte de esa colección de seis composiciones que conformaban el anterior trabajo. ¿Os pusieron como condición superar cierta cifra de ventas (o descargas legales) para poder grabar un long-play?
[The Bright]: En absoluto. Más bien el EP se publicó como una manera de abrir boca, empezar a presentar a The Bright y lo más importante, ¡darnos tiempo para grabar el LP! De hecho, creemos recordar que la grabación de LP empezó la misma semana que se publicó el EP.
A tenor de lo que sucediera posteriormente, ‘Odd towns’ y ‘Coffe and wine’ formaron parte del track list de vuestro primer largo, “Soundtrack for a winter’s tale”. Evidentemente, tenían que estar, pues son como vuestro santo y seña.
[The Bright]: La verdad es que nos planteamos la posibilidad de no incluirlas y nos parecía un delito que no estuvieran en el disco. Nos encantan esas dos canciones, y además son de las favoritas de nuestro público. Por otra parte un EP por definición tiene un alcance más limitado que un LP, y mucha gente no había podido hacerse con uno. Por todo eso, decidimos incluirlas, pero volviéndolas a grabar, puesto que en los meses que habían transcurrido las habíamos transformado un poco en los directos y pensamos que estaban más pulidas.
Incluso ‘Losing your way’o ‘Your private garden’ (de la que hace nada se ha estrenado el vídeoclip) ya formaban parte de vuestro repertorio en los directos. ¿Volvisteis a componer temas nuevos para “Soundtrack for a winter’s tale” aparte de las canciones que ya se conocían?
[The Bright]: Cuando firmamos con Subterfuge, lo primero que pensamos es “¡tenemos que escribir canciones!”. Necesitábamos mucho material nuevo, ya que nos gusta contar con temas de más para poder elegir a la hora de grabarlos, e incluso después de grabados seleccionamos material. El caso extremo se dio con ‘Your private garden’, el disco estaba prácticamente finalizado y creíamos que necesitábamos una canción cañera y con gancho, así que Juan apretó el botón de grabar y empezamos a improvisar unos acordes y una melodía. La canción se escribió en una tarde y se grabó en otra, y como suele pasar con las canciones de última hora, es el single.
Si acabo de preguntar por las canciones que se han compuesto… ¿Se regrabaron todas y cada una o algunas permanecieron con el mismo patrón sonoro que ya atesoraban inicialmente con “Coming back home”? Pregunto esto porque al igual que “Coming back home”, esta nueva colección se ha grabado también en los Estudios Tripolares de León, bajo la producción de Juan Marigorta.
[The Bright]: Todo lo que se escucha en el disco es material grabado expresamente para el mismo, incluso las dos canciones que ya formaron parte del LP se volvieron a grabar desde cero. Juan contaba con equipo nuevo, micros, previos, etc…. y también teníamos instrumentos nuevos, así que queríamos aprovecharlo todo para completar el mejor disco que estuviera a nuestro alcance. Además se puede decir que la tarea de completar un LP te cambia un poco el chip, el ritmo de trabajo no es el mismo y el nivel de exigencia que nos impusimos es muy alto.
Como curiosidad que algunas personas puedan desconocer, en el EP que firmabais como Bright Baby Blues existía una composición con letra en castellano llamada ‘Tarde tranquila’. Efectivamente no aparece en el nuevo disco, aunque puede haber algún ápice de la misma esparcida en él. ¿Es posible que no encajara dentro de la tónica general de “Soundtrack for a winter’s tale”?
[Miryam]: ‘Tarde tranquila’ fue un experimento, se puede decir que la escribí para demostrarme que era capaz de componer y cantar en castellano. Es una bonita canción, pero por ahora nos satisface más el resultado de nuestras canciones en inglés, así que decidimos dejarla aparcada. Además teníamos mucho material nuevo para elegir.
¡Hasta hay un B-side! ‘I will take’ sería la pieza en cuestión.
[The Bright]: Es una de las canciones que grabamos y, por algún motivo, decidimos que no formaría parte del LP. Aún así nos daba pena dejarla en un armario hasta que llegase nuestro próximo disco, así que Subterfuge nos dio la opción de incluirla como “bonus track” en la descarga del disco en iTunes, y nos pareció una buena idea.
Un regusto a la americana con ‘Sweet lady’ o ‘Deadweights’. Pero entre todas estas canciones hay dos que hace de historia punte; ‘Waving flags (outside)’ y ‘Question (inside)’, aunque también es verdad que hay otro par de tracks que tienen subtítulos. ¿Casualidad o un mensaje —digámosle- oculto?
[The Bright]: ‘Waving flag’ y ‘Question’ son dos canciones conectadas. Ambas son muy introspectivas, y se puede decir que son las dos caras de la misma moneda. ‘Waving flag’ es más luminosa, más escapista, mientras que ‘Question’ es la versión oscura y depresiva de la misma persona. Además tienen alguna conexión instrumental, algunos acordes y sonidos que se repiten en ambas. En cuanto al mensaje oculto, eso es mejor dejárselo al oyente, porque a cada persona le pueden transmitir algo distinto. Lo mejor es que cada uno las escuche y saque sus propias conclusiones.
No obstante, uno se topa con ‘Cowgirl in the sand’, espléndida versión de Neil Young que era habitual en vuestros conciertos. Pero si no era Young, era Cash o Petty los que sonaban alguna que otra vez bajo los focos. ¿Hubo alguna otra versión (aparte de la de Neil Young) que se pensara incluir en el álbum?
[The Bright]: Es cierto que en directo podemos tocar temas de gente diversa, aunque esta canción de Young nos pareció muy adecuada por varios motivos. El primero, por supuesto, porque es una canción tremenda. Además no está entre las más conocidas de su discografía, y eso era un punto a favor. Pero lo más importante es que nuestra versión era muy distinta a la original, que es muy eléctrica y con largos solos de guitarra. Conseguimos desnudarla y partir desde cero, y de esa manera la adaptamos a nuestro estilo y a nuestro sonido.
Quizá es una apreciación mía, pero encuentro un espíritu parecido al que había en “Wildflowers” (Tom Petty), ya no solo en la sencillez y acústica del sonido, sino que las fotos del libreto me han recordado muchísimo a las que hay en el trabajo del de Florida. Ya sabéis… instantáneas de los músicos mientras grababan, de los instrumentos del estudio, máquina de cinta… todo muy artesanal, vaya.
[The Bright]: ¡”Wildflowers” es uno de nuestros discos favoritos! Salvando las distancias, se puede decir que perseguimos un espíritu parecido al que tiene ese álbum. Tratamos de hacer un disco muy currado, con gran atención por los pequeños detalles, cada sonido, cada arreglo y cada instrumento están donde tienen que estar.
Antes he mentado a Juan Marigorta. Aunque aparentemente The Bright sean Miryam Gutiérrez y Aníbal Sánchez, Marigorta es la tercera figura que ha estado desde el principio en este proyecto, ya fuera produciendo como tocando. De hecho, él se encarga del bajo, batería, teclados…
[The Bright]: ¿Qué podemos decirte de Juan? Es nuestro músico favorito de León, nosotros éramos fans de su grupo, Zabriskie, y ya nos conocíamos desde bastante antes de The Bright. Además trabajar con él es muy fácil para nosotros, porque entiende como nadie el tipo de música que hacemos, y siempre llegamos al resultado que buscamos de forma fácil y natural. Nosotros tenemos muy claro lo que queremos cuando llegamos al estudio con una canción y él siempre sabe dar con el sonido adecuado, con el arreglo ideal y con el riff perfecto. Y siempre a la primera. Además ahora nos acompaña en directo a la batería, así que sigue implicado en el proyecto, por lo que nos podemos considerar muy afortunados.
Además de David Franco con el violín. Y es que no escatimáis en melodías. Pese a la sencillez instrumental que hay (más el banjo y la mandolina), suena una amalgama bastante compleja. Eso se transmite hasta en el título, un concepto invernal para una música cálida.
[The Bright]: Cierto, David Franco toca el violín en ‘Soundtrack’ y ‘Waving Flag’. Es un musicazo, cuando lo tienes delante tocando te deja con la boca abierta. En general, como te habíamos dicho, hemos intentado huir del concepto de “voz+acústica” y hemos añadido numerosas texturas para enriquecer las canciones. Hay banjos, mandolinas, pianos, teclados, baterías, muchas guitarras eléctricas y multitud de efectos y ruidos extraños. Lo último que queríamos es que la gente escuche el disco y se imagine a Miryam tocando las canciones con la guitarra en su habitación. Pero es cierto que el conjunto logra transmitir una gran calidez, aunque quizás sea la voz la que más se encarga de esa tarea.
¿Y ahora? La verdad es que aunque haya que trabajar para defender en directo este trabajo, se puede aventurar un excelente futuro para The Bright. Warner Chappell y Sony (que distribuye “Soundtrack for a winter’s tale”) son dos nombres que andan por ahí…
[The Bright]: Ahora lo que tenemos que hacer es seguir ensayando, tocar allá donde podamos y seguir escribiendo canciones. Tenemos una buena oportunidad de que la gente conozca nuestra música y no la queremos desperdiciar. Después de tantos años tocando en el circuito local, sabemos valorar muy bien nuestra situación actual, así que nos lo curraremos día a día. A partir de ahí, lo que venga será bienvenido.
Texto: Charly Hernández