Cuando en 1979 el batería Bill Ward le comunicó a su amigo Ozzy Osbourne que estaba fuera de Black Sabbath, el problemático vocalista no podía ni pensar que, en el fondo, le estaba haciendo un favor. Su posterior asociación con Randy Rhoads significó un magnífico despegue de su carrera en solitario con dos álbumes tan decisivos como Blizzard Of Ozz y Diary Of A Madman, precisamente, ambos reeditados recientemente con las bases originales de bajo y batería a cargo de Bob Daisley y Lee Kerslake respectivamente, las cuales fueron eliminadas en un edición anterior, debido a un conflicto creado entre ambas partes. Pero aquí lo que nos interesa es recuperar la memoria de Randy, el guitarrista que contribuyó al relanzamiento de un Ozzy en horas bajas y que un desafortunado accidente nos privó de seguir disfrutando de sus cualidades, como podemos observar en estos videos de Crazy Train y I Don’t Know así como en el restante con algunos excelentes solos.