It’s What I’m Thinking (Part One – Photographing Snowflakes) debiese ser el trabajo que le sitúe a nivel internacional en un puesto de honor, pues, en los estertores del año 2010, pocos creadores de la escena a la que representa se atrevieron con algo tan ambicioso. Y es que no es escaso el número de apostantes que sueñan con la década de la psicodelia, mientras que Badly Drawn Boy pasa directamente a los hechos recreándola en una mixtura entre The Byrds y Love (‘Too Many Miracles‘), al igual que reinventando lo que pergeñaron los miembros de Appaloosa (‘In Safe Hands‘).
Incluso habrá de aquellos oyentes que crean reconocer el deje de Leonard Cohen en el tema que titula al disco, aunque el padre de este invento despista añadiendo un sinuoso slide. Es tan osado que, en el momento en el que el seguidor se acostumbra a la proeza, él decide saltar en el tiempo al reinado ochentas de The Smiths y seguir su senda fraguando un ‘I Saw You Walk Away‘.
El camino artístico que ya estaba planteado en sus obras anteriores pero que aquí toma cuerpo de posible saga. Un lanzamiento en el que Stephen Hilton ha hecho de la producción algo digno de reseñar y valorar cual otra pieza clave en el entendimiento de una grabación como It’s What I’m Thinking.