Pero el mundo de aquella época no estaba por la labor de abrazar la propuesta iniciática de Bowie, una suerte de sonido music-hall inspirado en uno de los ídolos de David por entonces, Anthony Newley. Su manager Kenneth Pitt no debió opinar lo mismo pese a la poca respuesta recibida del público, y no se desanimó pese a ver cómo ni la inmensa campaña publicitaria tendida en la prensa musical británica ni la película para televisión realizada a la mayor gloria de Bowie (Love You Till Tuesday) recogían los ansiados frutos. El de David era ya un rostro sobradamente conocido, pero su repercusión musical era mínima en aquellos momentos.
El golpe de efecto necesario para lanzar su carrera llegaría con Space Oddity, álbum y single publicados en otoño de 1969 con la idea de aprovechar los réditos de la llegada del Hombre a la Luna. Todo ello a pesar de que el verdadero significado profundo de la letra apuntaba más hacia el cuelgue por estupefacientes que a la epopeya espacial. El movimiento se probó certero, y tanto el single como el LP que lo contenía alcanzaron altas cotas de ventas, el primero plantándose en el número 5 del Reino Unido y el segundo aupándose hasta el Top 20 tanto en la tierra natal de Bowie como en Estados Unidos.
En este Libro Negro del Duque Blanco se trata tanto este primer planteamiento y despegue profesional en su carrera como todas las mutaciones que llegarían con el paso de los años. Posee la obra un magnífico trabajo de investigación que se ve complementado por un desarrollo fluido en los textos. Es por tanto una obra que cualquier Bowie-adicto no debe dejar pasar.
TÍTULO: David Bowie black book.
AUTOR: Chris Charlesworth Miles.
EDITORIAL: Omnibus Press.