Si la carrera de estos ingleses fue complicada en sus inicios y más tarde tomaron un rumbo que parecía haber dado en la diana, ahora lamentablemente han dado un pequeño traspiés. Un tropiezo que no tiene tanto que ver con la pérdida de calidad de sus composiciones, que siguen siendo interesantes, sino más bien porque han dejado atrás aquello que les diferenciaba. La banda que en Tighly Unwound sonaba fresca y y que continuó en Someone Here Is Missing suena ahora como Porcupine Tree y una pizca de Oceansize.

Desde el comienzo con Burning Pieces y Warm Seas ya queda patente ese más que notable parecido con la banda de Steven Wilson. Todo esto suena a buscar ese sonido que tan buenos resultados le ha dado el señor Wilson y, aunque la opción es totalmente lícita y casi comprensible, se ha hecho a costa de perder más de lo que pueden ganar con el cambio. Aún así, el disco aún mantiene momentos remarcables, como Build a Work o Someone Pull Me Out.

Si este fuera su primer trabajo probablemente sería más fácil decir que contiene buenas ideas y que augura un buen futuro para la banda, pero la cuestión es que estos ingleses ya nos han ofrecido discos mucho más inspirados que este y ahora nos privan de todo aquello dejando una terrible sensación de indiferencia. A la espera de un nuevo álbum que vuelva por los cauces anteriores habrá que tirar de otros trabajos suyos bastante más interesantes.

Texto: Juan Manuel Vilches