La búsqueda de la credibilidad. ¡Santa credibilidad! ¡Bendita! Cualquier profesional, sea de la disciplina que sea, desde el arquitecto al músico tiene cual meta dicha palabra, la “credibilidad”. Pueden vacilar a su séquito, a sus respetuosos seguidores, asegurando que lo que quieren es llevar a puerto seguro su propuesta… pero al final, cuando se cuentan las muescas en la culata, la credibilidad es lo que queda. Tal vez no ganes discos de oro pero, si eres bueno en lo tuyo, no te vendes y siempre trabajas desde el corazón, poniendo las tripas en cada nueva envestida creativa, esa credibilidad quedará pegada a ti de por vida.

Javier Vargas es sinónimo de credibilidad, del sacar adelante las cosas con la firma que a uno le da su propio discernir, su propio crecer siéndose siempre fiel. Fidelidad. Eso no quiere decir que no puedas tocar hoy blues y mañana rock descarnado; lo fundamental es hacerlo creíble, hacerlo como la Vargas Blues Band. Javier ha participado en la composición de todas las piezas listadas en este trabajo, a excepción de ‘Do You Think I’m Sexy‘ —una revisión del clásico de Rod Stewart al que Vargas, acompañado por Pat Travers, Paul Shortino, Tony Franklin y Carmine Appice, ha dado la vuelta para reinventarlo— y ‘Parisienne Walkways‘, pieza que originariamente Gary Moore grabó en su LP Back On The Streets a pachas con Phil Lynott.

El resultado son catorce cortes listos para ser consumidos sin prisa, canciones en las que lo mismo nos topamos con Glenn Hughes como con Tim Mitchell, Chris Rea, Devon Allman o el excelso Junior Wells, por destacar cuatro invitados de una lista de varias líneas. Por ello, hazme caso, compra un marco resultón y coloca dentro este CD, luego cuélgalo en una de las paredes de tu habitación y, listo, ya tienes una obra de arte; mientras, no dejes que pare de girar en tu reproductor Vargas Blues Band & Company.

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Sergio Guillén