Con algunos meses de retraso son respecto a su lanzamiento le hacemos por fin un hueco uno de los discos que probablemente ocupará un puesto entre los más destacados del año. La entrada en la banda de Emil Amos en 2008 después del abandono del batería original Chris Hakius trajo nuevos vientos para la formación y eso se notó en God Is Good. Sin embargo, parece que el tiempo juntos le ha sentado muy bien al dúo, que con Advaitic Songs han compuesto una obra majestuosa, al nivel de sus primeros trabajos, pero con unas cuantas diferencias.
La figura de Juan Bautista en la portada ya nos anticipa bastante del enfoque sacro que va a tener el álbum, pero desde el primer minuto de Addis entramos de lleno en un nuevo camino rodeado de una espiritualidad y religiosidad más cercanas al Próximo Oriente. Después de este evocador comienzo, llegamos con State Of Non-Return a esos riffs monolíticos y pesados característicos, aunque mucho mejor hilados con el chelo que en God Is Good. Gethsemane gira de nuevo hacia los nuevos derroteros ya mencionados y en esa línea se va mantener el álbum hasta el enorme final de Haqq al-Yaqin, aunque con alguna incursión electrónica en Sinai.
El conjunto puede resultar a quienes no estén habituados a este tipo de sonidos extraño, pero muy pronto descubrirán en sus hipnóticos pasajes una trascendencia y un contenido muy poco habituales. Advaitic Songs entronca a Om directamente con las músicas tradicionales de Asia y Oriente Medio e incluso con las de ciertas zonas mediterráneas, pero más allá este disco los pone en un plano muy superior al de las mejores bandas de doom actuales.
Texto: Juan Manuel Vilches