Artista: Jose Luis Montón
Título: Flamenco Kids
Sello: Sello Autor
Fecha de publicación: 08 de septiembre de 2009
Más información: www.promosapiens.net
Listado de canciones:
01- El Camaleón Daltónico
02- El Erizo Bailarín
03- Nana De Luis
04- El Camarón Opaco
05- El Cangrejo Moro
06- La Urta Mellada
07- Nana de Carmen
08- Albar
09- La Ortiguilla
10- La Rebelión De Las Incógnitas
Tratar de acercar el flamenco al gran público es una tarea harta difícil. El flamenco, al igual que el jazz, exige como requisito indispensable tener un oído muy educado. Será por eso que la labor se simplifica si la música está dirigida al público infantil, ese que aún no ha asociado sus gustos ni ha adaptado su oído a ninguna música en particular. Aún así la labor tanto de Teresa del Pozo en las letras como del guitarrista José Luis Montón en la música es, como poco, para quitarse el sombrero. “Flamenco Kids” es un disco comprometido que apuesta por el futuro y la magia, compuesto con la inocencia y la imaginación de un niño. Y así lo demuestran las canciones que dan cuerpo y sobre todo alma al disco. Desde “El Camaleón Daltónico“, canción con la que arranca, una preciosa alegría que enamora desde sus primeras notas, hasta “La Rebelión De Las Incógnitas“, tema que lo cierra.
En el disco se dan cita distintos estilos y toques flamencos, haciendo más llevadero el camino de lo exquisito con rumbas — la preciosa e infantil “El Erizo Bailarín” — bulerías – “La Ortiguilla“, con un toque de guitarra tan precioso como preciosista, o “La Urta Mellada” — y tangos y tanguillos – “El Camarón Opaco” y “El Cangrejo Moro“, esta última con sucedáneos de chirigota gaditana -. Completan un buen disco los temas “Nana De Luis“, “Nana de Carmen“, con ambas consigo que se duerma mi sobrina, y “Albar“. Las diez canciones de “Flamenco Kids“, con la duración justa y pintando de sueños el disco, tienen el don de enseñar al que no sabe, don que solo se puede comparar con la satisfacción de dar de comer al hambriento o de dar de beber al sediento. Ya lo dijo Jesucristo: dejad que los niños se acerquen a mí.