Hace unos días, en la entrevista que realicé a Andy Powell en relación a su venida a España este 2012, el propio guitarrista y vocal subrayaba el hecho de que en estas décadas ha mantenido a Wishbone Ash funcionando a pleno rendimiento sobre los escenarios, olvidándose así de cualquier tipo de periodo vacacional o etapa de relajo. Puede parecer una exageración pero, cuando ves a la banda que lidera comenzar un concierto con ‘The King Will Come‘ y caes embelesado por su elegancia, precisión y virtuosismo, no te queda otra que aplaudir la perseverancia que Powell ha mantenido cual músico de directo, al igual que tanto la seriedad como el compromiso que ha exigido a sus compañeros de viaje.
‘Living Proof‘ arrancó muy emotivos aplausos, impresionados los asistentes por poder escuchar y ver en directo, frente a sus propias narices, el dramatismo de una pieza impresionante, destacadísima por sus maneras de pop-rock engrandecido en progresiones. Las palmas acompañaron tanto en esta mágica baza con en muchas otras que se jugaron. La funk rock ‘Engine Overheat‘ tampoco pasó desapercibida, con un Powell que acompañaba con las manos el recorrido del estribillo, al igual que cautivó su técnica con las armonías frente a una guitarra de doce cuerdas en ‘Invisible Thread‘. ‘Jail Bait‘ y su boogie rock nos acercaron a los últimos momentos de un espectáculo electrizante, un show que con ‘Phoenix‘ se alzaba hasta puntos insospechados. El tema de cierre de aquella cita no sería suficiente para unos seguidores que, aunque escasos aquella velada —estamos hablando de los Ash, auténticas leyendas—, se sentían alcanzando otras dimensiones de éxtasis al escuchar a Andy cantar aquello de «Phoenix rise… raise your head to the sky»; por ello, cual postre, el bis de ‘Blowin’ Free‘ no desmereció en absoluto. Por cierto, estos Wishbone Ash poseen en la actualidad una de las bases rítmicas más destacadas de la escena británica, un Bob Skeat (bajista) y un Joseph Crabtree(baterista) que da gloria escucharlos.
Texto: Sergio Guillén. Fotos: África Paredes