Álbum: Axe to Fall
Discográfica: Epitaph Records
País: Estados Unidos
Año: 2009
Más información: web/myspace
Tracklist:
01. Dark Horse
02. Reap What You Sow
03. Axe To Fall
04. Effigy
05. Worms Will Feed/Rats Will Feast
06. Wishing Well
07. Damages
08. Losing Battle
09. Dead Beat
10. Cutter
11. Slave Driver
12. Cruel Bloom
13. Wretched World
Inesperado. Es lo primero que se me ocurre a la hora de entrar a valorar Axe to Fall [Epitaph Records, 2009], el nuevo trabajo discográfico de Converge. Y no, si todavía no han podido escucharlo, no es que hayan cambiado, mutado o evolucionado a nada que no encaje perfectamente dentro de su universo musical. Lo que no me esperaba es que un nuevo álbum de Converge me fuese a enganchar de… sí, del sitio que están pensando.
Tres entregas después de esa referencia de escucha obligatoria de la música extrema en que se convirtió Jane Doe [Equal Vision, 2001], estamos hablando de You Fail Me [Epitaph Records, 2004], No Heroes [Epitaph Records, 2006] y del disco que nos ocupa, Converge han vuelto a hacerlo. Han fabricado un disco estremecedor, que no puedo parar de escuchar. Y eso que decían que con la edad uno termina cambiando, incluso en términos musicales. Pues a pesar de que cada vez me decanto por sonidos más convencionales, lo cierto es que Axe to Fall viene a contradecir esta teoría ya que cuando el resultado es bueno, la atracción es inevitable.
Cosa de brujas o no, el disco es ideal para un aquelarre. Las cabalgadas por el mástil de Ballou parecen salidas del averno, los solos con los que nos deleita, en cortes como “Dark Horse” o “Reap What You Sow“, deberían hacer sonrojar a más de una banda de metal de la última década, y Bannon brama con esa desesperación, produciendo dolor, como ningún otro sabe hacer.
La primera parte es para ponerse el cinturón. Alta velocidad, cuatro trallazos para empezar, que están dominados por la guitarra de Ballou. Riffs apabullantes y solos muy jebis, al igual que demoledores. El ritmo frenético queda interrumpido por “Worms Will Feed/Rats Will Feast“, de tempo atrancado, pantanoso, con una duración que casi supera el total de las cuatro composiciones anteriores. Con “Wishing Well” comienzan a sentirse los Converge más habituales, que duran hasta que llega “Cutter“. Una auténtica arma de destrucción masiva, en el pit, por supuesto.
El disco se completa con “Cruel Bloom” y “Wretched World“, de más de siete minutos de duración. Dos cortes que ponen la pausa, acaban con el aquelarre, como hacían “In Her Shadow” en You Fail Me o “Grim Heart/Black Rose” en No Heroes. En “Cruel Bloom“, donde hacen uso de las guitarras acústicas, se puede apreciar la voz de Steve von Till, de Neurosis. Aportando esas sensaciones que a uno le recorren la espalda cuando escucha a Neurosis. Y es que también en el apartado de las colaboraciones Axe to Fall es un álbum de un alto nivel. Por él desfillan Mookie Singerman -Genghis Tron-, que lleva el peso vocal en la deliciosa y melódica “Wretched World“; John Pettibone -ex Himsa-, encargado de las voces de fondo de “Cutter“; lo mismo que hace George Hirsch –Blacklisted– en “Axe to Fall” y Uffe Cederlund –Disfear– en “Wishing Well“, al que también aporta guitarras; mientras que Steven Brodsky y Adam McGrath -ambos de Cave In– tocan las guitaras de “Effigy“. Colaboraciones de lujo para un álbum de luxe.
PD: Si no conoce a Converge y todavía se pregunta qué demonios hacen, la respuesta es música extrema. O, mejor dicho, una batidora extrema, única e intransferible. No hacen hardcore, ni metal, ni punk, ni noise, ni… Sino todo ello, mezclado, agitado, y llevado hasta el límite.
Valoración: 8
Texto: Carlos Ayllón