AIR tiene un problema de fondo que debería tratar cuanto antes: vive de rentas. Sí, es cierto que hacen tanto ruido como antes a la hora de sacar un videoclip, pero están convirtiéndose en los U2 de la electrónica, desde el Talkie Walkie (2004) no sacaron ninguna canción que apetezca recordar y parece que están cómodos mostrando un aspecto snob en sus videoclips -de buen gusto, sí, pero alejados del mundo-. Amamos Moon Safari y Talkie Walkie, pero como segundas partes nunca son buenas, Love 2 está condenado al mismo lugar que Pocket Symphony: el olvido.