La característica voz de Javi Fernández nos transporta a los años 70, con un registro y tonalidad muy concretos pero que de alguna manera evocan la forma de proceder frente al micrófono de aquella década. Un disco que gustará tanto a un fanático de piezas como ‘La Catedral‘ de los primerísimos Topo como a los que se enamoran con los desarrollos en las teclas de, por ejemplo, unos Genesis. Las atmósferas que extienden, como les pasara a los ya analizados aquí Tricantropus, tienen mucho de unos Pink Floyd clásicos traídos a la actualidad —aunque Albatros en otra línea de los creadores del CD El Sueño De Arsinoe—.
Cantan ante todo en castellano, aunque en ‘Planeta Prohibido‘ nos narran los textos en inglés y funciona igual de bien. Pueden resultar tan detallistas como rudos, en una justa medida que los hace bastantes reconocibles. Amplificando la psicodelia para conquistar las galaxias progresivas o sinfónicas… y que dure.