Pachi es un tipo sensato, meticuloso, paciente… le gusta sembrar para recoger frutos una vez haya pasado el tiempo. No corre al ritmo que marca hoy la industria musical. No se deja llevar por los vaivenes que atenazan a otros compañeros, ni vive agobiado por la dictadura del calendario. Por eso en su nuevo disco, Material de disección (BMG), que aunque ya lleve algunos meses en formato digital está viendo estos días la luz en tiendas físicas, es un trabajo lento, de degustación suave y pausada, que no pide a gritos un hueco en la cabeza del oyente, sino que entra poco a poco. Pachi (Alis) lo sabe, de hecho apostó por explotar esas sensaciones en estas once canciones. “Es que con el anterior, Cuando el sol nos dé calambre (09) ya hice lo otro. Era un disco que a la primera me divertía, me subía el ánimo, me lo bajaba… eran canciones muy poco trabajadas, muy directas, pensadas para eso. No creo que deba repetirme, y por eso en este busqué hacer esto”, nos explica ilustrándonos qué es lo que le motiva a él de un concierto: “Un concierto coreado de principio a fin es un concierto de Alejandro Sanz, y yo eso no me lo quiero tragar. Al público le intento dar lo que yo quiero ver, prefiero a Rufus Wainwright aunque no cante sus canciones; es un disco tranquilo, y difícil de cantar, lo sé, te soy sincero. Pero sé que cuando termino, aplauden a rabiar, siento que he conseguido mi objetivo”.

Su trayectoria ha estado a menudo en tierra de nadie, con una única tónica que ha mandado a lo largo de estos años, ser dueño de su biografía, una actitud muy indie, que él se encarga de matizar según nos explica cómo es su día a día: “indie no, independiente, en el indie hoy en día vale todo y no creo que deba ser así. Hago los discos como me apetece, del primero al último y cuando termino se lo doy a una editorial o a una compañía que me lo quiera sacar, toda la vida he ido tirando de adelantos, pues nunca me fichó una compañía como artista, es como si voy al banco y decido en qué invierto un dinero que devuelvo estando hasta en la sopa, siendo telonero de Amaral, haciendo canciones para anuncios, para bandas sonoras…”


ALMA DISECCIONADA

Pachi puede estar más que satisfecho de su cuarto disco, Material de disección examina los sentimientos con maestría y certeza, con una ironía que deja un poso no tan triste como a primera vista la producción pueda hacer ver. “No creo que sean canciones tristes, prueba de ello es la que da título al disco, Material de disección. Hay positivismo y trasciende más la sensación de melancolía. Para mí lo difícil de hacer una canción no es hacerla en sí, sino darle una producción, porque está casi todo inventado y me parece más difícil porque son mías, Suso Saiz no tiene complejos y por eso me uní a él, es un maestro, palabras mayores”, dice deshaciéndose en elogios.

Le veremos el próximo 1 de diciembre en la sala El Sol presentando este nuevo disco, un concierto de una gira de invierno que se presenta prometedora, “faltaban piezas en el engranaje que ahora han llegado, gente nueva que está revitalizando el disco. Ahora que ha pasado el tiempo sí noto que entra poco a poco pero cuando entra se queda”, dice confiado. alismusic.com