En 1997, el Círculo de Bellas Artes funcionó como una de las sedes del Festimad en el que participaron unos casi desconocidos Amaral. Con esta anécdota dieron comienzo Eva y Juan a la presentación ante los medios de su nuevo trabajo, celebrada esta semana en la histórica entidad cultural de la capital.

Su séptimo álbum, publicado el 30 de octubre y para el que han contado, entre otros, con Abraham Boba (órgano en uno de los temas), Chris Taylor (bajo), Toni Toledo y Ged Lynch (baterías) o Tomás Virgos (piano), lleva por título Nocturnal, porque “somos muy nocturnos a la hora de escribir, la noche como un punto de encuentro”, según explicó Juan. Y siguiendo esta línea nocturna, la portada del disco la protagonizan unas fotografías de la propia Eva, quien experimentó con distintos negativos inspirándose en las cuevas de Altamira, hasta conseguir dar con lo que había imaginado: “El primer hombre de la Tierra intentando alcanzar la luna con la mano”.

En un disco donde “todas las canciones deberían ser singles”, según comentó el dúo zaragozano, “Llévame muy lejos” fue la elegida como primer aperitivo de este nuevo material, llegado cuatro años después de Hacia lo Salvaje. Eva y Juan señalaron que algunas personas decían que había pasado mucho tiempo entre discos, pero insistieron en que han sido cuatro años que en los que no han parado. Ente otras cosas, porque su gira anterior se alargó más de lo esperado, por lo que para la próxima “tenemos el reto de organizarnos mejor”, aseguró Juan. Dicha gira llegará a España en mayo, después de pasear sus nuevas composiciones por otros países, si bien no se detallaron fechas ni lugares.

El broche final a este encuentro con la prensa lo pusieron con la interpretación en formato acústico de “Llévame muy lejos” y “Nadie nos recordará“, con el torrente de voz de Eva inundando la sala y los tejados de Madrid como testigos.

Texto: Beatriz H. Viloria Foto: Javier Soto Azpitarte