Benidorm, ciudad sin ley, al menos sin ley estética, rascacielos de silueta neoyorquina, guiris amontonándose en bares trasplantados desde Sheffield y abuelos clavando sombrillas al amanecer mientras sus nietos todavía bailan en discotecas de diseño marciano. Menos mal que bajo una roca cortada se celebra el Low Cost Festival, encuentro anual de varios nombres importantes […]