CIUDAD: Barcelona
LUGAR: Rocksound
GRUPO: The Muggs
DURACIÓN: 90 minutos
INVITADOS: Peachy Joke (45 m.)
Cuando recibí la información por parte de la promotora de la gira de The Muggs por España, no tenía ni idea de su existencia y… sin embargo, era la tercera vez que se daban una vuelta por estas tierras. Se hacía necesario un repaso a su discografía para programar si valía la pena asistir a uno de sus conciertos y descubrí toda una joya que había que ver en acción y comprobar si su directo era igual de convincente que su trabajo en estudio.
Llegado el momento de su presentación, la apariencia de los componentes del grupo preparando sus instrumentos en el pequeño escenario del Rocksound no irradiaba, digamos, carisma. El guitarrista Danny Methric tenía pinta de profesor “progre”, el batería Todd Glass la de un turista lejos de su habitat natural y el bajista Tony DeNardo, más que músico, parecía un personaje salido de una “peli” de Hollywood de los años cincuenta.
Antes de comenzar la actuación la primera sorpresa nos la llevamos al comprobar que el bajo había sido sustituido por un teclado Fender Rhodes, después descubrimos que DeNardo se encargaba de crear las líneas de bajo a través de los graves del teclado debido a que, víctima de un derrame cerebral en 2001, tiene el lado derecho de su cuerpo parcialmente paralizado.
La siguiente sorpresa nos la llevamos nada más comenzar la actuación. Desde el principio, Danny, no solo dejó clara su maestría con las seis cuerdas sino que exhibió una vitalidad contagiosa con sus continuos movimientos, alejándose del micrófono cuando necesitaba mostrar sus aptitudes con plena libertad de acción; asimismo, pudimos verificar la capacidad de pegada de Todd y, alucinamos con la resoliva capacidad de Tony para no perder el ritmo de sus colegas usando el teclado solo con su mano izquierda.
Con el transcurrir del concierto, el “profesor”, el “turista” y el “actor”, se quitaron sus máscaras y dejaron al descubierto su verdadera condición de músicos altamente cualificados para, cada cual en su parcela, llevar la actuación hacia el frenetismo instrumental sin abandonar el toque sentimental, dejando aflorar sus referencias blues/hard rock e inundar el local de un magnestismo embriagador cuyo aroma fue impregnando el ambiente hasta alcanzar altas cotas de entusiasmo por parte de los presentes, quienes obligaron a la banda de Detrot a realizar dos bises, alargando el concierto hasta los 90 minutos.
A pesar de que desde el inicio dejaron patente sus habilidades, la transformación de los protagonistas fue paulatina a medida que el concierto avanzaba y aumentaba su efusividad. Danny, no paraba de transpirar y, mientras nos dejaba pasmados con la seguridad y destreza con la que extraía los sonidos de su guitarra, un continuo goteo de sudor surcaba su cuerpo hasta encontrar el camino del suelo a través de su codo izquierdo. Todd también comenzó a dejar señales de su esfuerzo y, su tranquilo aspecto del principio devino en un “desmelenamiento” total fruto de su entusiasta y poderosa pegada, subiendo los brazos para dejarlos caer de forma demoledora, temiendo presenciar el desmoronamiento de la batería en cualquier momento. Tony, con menos desgaste físico, no dejaba de mover los dedos de su mano izquierda y, sobre todo en los temas más rápidos, era fantástico comprobar su agilidad y precisión sin perder la dinámica de sus compañeros.
En cuanto a el repertorio, no desaprovecharon la oportunidad de dar el suficiente protagonismo a su último álbum, el brillante Born Ugly, del que interpretaron, si la memoria no me traiciona, “Blood Meridian”, “Born Ugly”, “Home Free”, “Losing End Blues”, “Clean Break Blues”, “Notes From Underground”, “6 To Midnite” y “Kitchen Sink Blues”, desatanto está última una apasionada respuesta por parte de la concurrencia.
Evidentemente, no se olvidaron de sus dos primeros trabajos, On With The Show y The Muggs, de los que tocaron, entre otras piezas, “On With The Show”, “Never Know Why”, “Hard Love” y “Get It On”, que formó parte de los bises.
También, fueron intercalando versiones del desaparecido Rory Gallagher, uno de los artistas que más les ha influenciado, además de Grand Funk, Cactus y Humble Pie, cuyo espíritu revoloteó por la sala Rocksound, sin olvidar a The Beatles, de quienes interpretaron parte de “Help” en una versión contundente llevándola a su propio estilo.
En conclusión, un absoluto placer y toda una gozada de concierto que dejó algo incuestionable; si la música tiene la calidad suficiente, no es necesario esconderse detrás de cualquier tipo de paraferenalia. Un escenario sencillo y con el espacio limitado puede ser perfectamente apto para mostrar la grandeza de unos músicos; en este caso los integrantes de The Muggs, un nombre que no deben olvidar los seguidores del hard rock/blues que quieran apuntar competitivos grupos a su lista de favoritos.
PEACHY JOKE
Como les suele pasar a los invitados, Peachy Joke, una banda originaria del País Vasco afincada en Barcelona desde hace un tiempo, tuvo la dura tarea de “calentar” el ambiente mientras llegaba la hora de los protagonistas principales ante una escasa parroquia que, a pesar del escaso entusiasmo demostrado, pudo presenciar una actuación de lo más agradable. No puedo imaginarme un grupo que encajara mejor con la onda de The Muggs. Peachy Joke ejecutaron una serie de interesantes canciones envueltas en en una atmósfera hardrockera tintada de elementos bluesy y texturas setenteras, con algún momento en clave George Thorogood. Una actuación palpitante que tuvo su toque más visceral en la presencia del teclista Gere, quien incluso llegó a subirse en lo alto de su teclado para contorsionarse apasionadamente.
CRONICA Y FOTOS LOCKY PEREZ
Crónica The Muggs (04-06-2012 — Rocksound-Barcelona)4 thoughts on “”