España acogía la visita de una de las bandas estandarte del pop punk en la actualidad,
New Found Glory pasaban por la península para presentar su último trabajo
Resurrection.
La banda, formada en Florida en 1997 y considerados los pioneros de este estilo musical, venían de la mano de
Cap Cap Producciones, y estaban acompañados, en las dos fechas, por los madrileños
Days of Heroes, y los barceloneses
Daylight.
El concierto en Madrid, acogido por la sala Penélope, contaba con una buena entrada, algo más de la mitad del aforo, aunque se nota cada vez más que la subida de IVA está afectando seriamente a la música en directo.
Con la sala ya con un aforo considerable, saltaron al escenario la banda autóctona Days of Heroes, que desde la última vez que un servidor les ha visto en directo, han sufrido algún cambio entre sus filas. Sin embargo, estos cambios no se vieron reflejados en su buen hacer sobre el escenario. Punk rock aderezado con melodías más suaves, todo ello acompañado por la voz de Tweety, que hace que cada uno de los temas acabe siendo de esas canciones pegadizas que uno no puede quitarse de la cabeza y no puede estarse quieto al escucharla.
Un concierto muy completo de los madrileños, que hicieron a los asistentes pegar los primeros botes en la sala.
Tras ellos, saltaron a escena la banda de la ciudad condal Daylight, con los hermanos Burek a la cabeza. Tras alguna que otra fatalidad en su viaje a Madrid, con uno de sus componentes enfermo y un problema con su furgoneta, estos chicos se presentaron en el escenario con ganas de darlo todo, y vaya si lo hicieron. En un constante baile de melodías pegadizas mezcladas con saltos y riffs de guitarras, Daylight dieron quizá el mejor concierto de los que he podido ver de esta banda, y ya van unos cuántos. Tocando temas de su último trabajo One more fight y de su anterior disco Too cool for shcool.
Ofrecieron un concierto redondo, donde las ganas de saltar no cesaban en ningún instante, y donde los ritmos de guitarra y bajo se fundían de forma contante en forma de melodías pegadizas.
Fueron dos aperitivos de lujo para lo que estaba por venir.
Finalmente, los cabezas de cartel hacían acto de presencia sobre el escenario. New Found Glory se presentaban para dar el último concierto de su gira Pop punks not dead and more, con una sala que esperaba impaciente la presencia de Chad, Jordan, Cyrus e Ian. Con temas como “Selfless” y “Ready and Willing” fueron presentando el que es su octavo disco de estudio caldeando el ambiente a base de riffs de guitarra, y contundencia en la batería.
El público no cejó ni un instante de disfrutar y bailar, con contínuos pogos entre los asistentes.
Si duda uno de los momentos más movidos y emocionantes de la noche fue cuando tocaron una de sus versiones más conocidas, con el tema “Kiss me“.
La noche estaba siendo redonda, público y banda estaban en plena sintonía y los acordes de los temas, mezclando lo antiguo con su último disco, hacían las delicias de los presentes.
Llegó el momento de los bises y los asistentes se dejaron todo en la pista, gastando sus última energías en un concierto que no tuvo ni un momento tranquilo y en el que los ritmos de las guitarras y las baterías parecían marcar el compás de cada uno de los movimientos de los asistentes, incluyendo el que suscribe estas palabras.
En definitiva un concierto muy completo, que animaba a moverse una y otra vez y que nos hacía recordar a los tiempos en los que bandas como Offspring o NOFX estaban en boca de todos.