Marty Friedman, visitaba España por vez primera como artista solista y, aunque le precedía su fama como excelente instrumentista, su presentación en directo no dejaba de tener ciertas incógnitas. Es normal que en este tipo de eventos al protagonista principal le de por recrear de manera exagerada sus virtudes. Por fortuna para quienes asistimos a su recital en Barcelona (supongo que en los restantes no habrá sido diferente) ese no fue el caso.
Complacidos tras dos horas de concierto, que para nada se hicieron largas, comprobamos que Marty, además de ratificar sus reconocidas habilidades, evitó cualquier tipo de exceso con las escalas, interpretando las canciones lo más fielmente posible, sin añadidos solistas interminables. Además, exhibió una energía y un físico que poco tienen que ver con sus casi 50 años de edad.
Obviamente, en su repertorio existen inevitables momentos de cierta filigrana, pero siempre prevaleció el dinamismo sobre los interludios menos agitados, que fueron los mínimos, con lo cual, la función se nutrió de una resolutiva vitalidad desde el principio y se mantuvo hasta los últimos compases.
Mención especial para el inquieto batería, un auténtico paranoico dándole a los tambores sin parar de gesticular y con pinta de haber salido de un manicomio. Por su parte, Ohmura supo acompañar al “jefe” con prestancia y fue recompensado con minutos de protagonismo. No desentonó Yoshinari, en lo que respecta al trato musical, aunque en imagen visual fuese más comedido que sus dos compatriotas, sobre todo Ohmura quien, con sus ajustadas mallas de tigre y su guitarra de color fucsia salpicada de purpurina, mostró una surrealista imagen tipo “vintage ochentero” que casi daba vergüenza ajena. También hay que reconocer ciertos detalles interesantes de su vestimenta como la cinta que sobresalía de su bota a imitación de las que se colocaban los pilotos japoneses kamikazes en las misiones suicidas durante la Segunda Guerra Mundial.
El repertorio consistió en todo un repaso a su discografía. La actuación comenzó con temas muy rítmicos y pegadizos como, “Street Demon” y “Its The Unreal Thing”, a los que siguió “Amagi Goe”, la primera de las varias referencias al disco Tokio Jukebox, donde Marty fusiona sus influencias occidentales con la música japonesa.
A continuación sonaron “Elixir” y “Stigmata Addiction”, piezas que combinan complejos desarrollos guitarreros para el lucimiento de Mr. Friedman con momentos de recurrencia rítmica.
Marty, se excusó por su escaso conocimiento del español y fue soltando las frases que sabía… “hola Barcelona”, “feliz Navidad”, “señorita bonita”… También felicitó repetidas veces a los “futboleros” por el título de Liga del Barcelona. La primera vez lo dijo bien, “Visca Barça” pero luego ya se le olvidó cómo era y pasó a decir “Vasca Barça”… En fin notas de humor que se repitieron a la hora de presentar a la banda ya hacia el final del concierto cuando mencionó que no sabía si Mitsuru Fujisawa también provenía de Japón o era de otro planeta, debido a su “marciana” imagen.
Con un local con tres cuartos de entrada y un público contagiado por el entusiasmo, la banda acometió el medley en el que incluyen y permutan las versiones “Ashes To Ashes” de Rammstein y “My Oh My” de Slade de una forma tan ingeniosa que queda como una nueva y atractiva canción. Una muestra más de la creatividad de Marty.
En el tramo final unas sugestivas líneas de bajo dieron entrada a otro vibrante momento con “Salt In The Wound” para que, seguidamente, Ohmura tuviera la oportunidad de ejercitar su técnica aportando un solo en “Ripped”.
Dos nuevos aportes de fusión musical entre oriente y occidente como “Yuki No Hana” y “Kaeritaku Natta Yo”, dieron paso a “Dragon Mistress” que incluyó un entretenido duelo entre Friedman y Ohmura.
Ya en los bises, como el título de la canción de su último álbum, Marty anunció que era hora de la despedida, de “Time To Say Goodbye”, al que siguió “Thunder March”, aunque aún regresaron una segunda vez al escenario para despedirse con otro tema de nuevo cuño, “Bad D.N.A.”.
1) STREET DEMON (Loudspeaker)
2) ITS THE UNREAL THING (Music For Speeding)
3) AMAGI GOE (Tokio Jukebox)
4) BALLAD OF THE BARBIE BANDITS (Live In Europe)
5) TSUME TSUME TSUME (Tokio Jukebox)
6) ELIXIR (Loudspeaker)
7) STIGMATA ADDICTION (Loudspeaker)
8) GIMME A DOSE (Music For Speeding)
9) CHEER GIRL RAMPAGE (Music For Speeding)
10) ASHES TO ASHES/MY OH MY (Medley)
11) FORBIDDEN CITY (Dragon’s Kiss)
12) TORNADO OF SOULS (Future Adict)
13) DEVIL TAKE TOMORROW (Loudspeaker)
14) LETTER (Inédita)
15) NOVOCAINE KISS (Music For Speeding)
16) ANGEL (Scenes)
17) SALT IN THE WOUND (Music For Speeding)
18) RIPPED (Solo de Ohmura) (Music For Speeding)
19) YUKI NO HANA (Tokio Jukebox)
20) KAERITAKU NATTA YO (Tokio Jukebox)
21) DRAGON MISTRESS/Duelo de guitarras (Dragon’s Kiss)
BIS1
22) TIME TO SAY GOODBYE (Bad D.N.A)
23) THUNDER MARCH (Dragon’s Kiss) 1
BIS2
24) BAD D.N.A. (Bad D.N.A)
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