En un mundo musical tan de plástico como el actual Daniel Higiénico es una “Rara Avis” que se dedica a poner toda la carne en el asador con honestidad y sin ganas de rendirse, a pesar de que desgraciadamente seamos pocos los que rindamos pleitesía a una persona que no solo se dedica a la música ,sino también al teatro de humor cabrón como su última obra llamada “Palabra de Ornitorrinco”, a escribir cuentos y relatos sin olvidarse de dar salida a su faceta más humorística con monólogos cargados de denuncia y mala leche siendo politicamente correcto.
Vuelve con nuevo disco llamado “6000 millones” producido por “Lichis” de la cabra mecánica que ha sabido darle a Daniel una nueva dimensión sonora a sus canciones a base de Blues, Jazz o Swing sin quitar ese punto de fuerza que tienen las canciones y pinceladas de buen rock que queda bien patente en su descarga en directo.
Para abrir la noche tuvimos a la Orquesta Pinha completamente desconocidos para mi que vienen de Madrid y que se encargan de aunar estilos como el folk, el jazz y otros como el tango o las polkas interpretados de manera acústica e instrumental. Aunque no es lo que más me gusta ni emociona pero hay que reconocer la calidad de la banda y su propuesta.
Por fín salió Daniel Higiénico para comenzar un noche mágica con “6000 millones” que dá título al trabajo que venía presentando con sabor de blues lento, lleno de sentimiento como pocos pueden hacer sobre un escenario a lo que añades la interpretación teatral de cada tema que da un extra más que interesante a la canción tocada. Por suerte sonaron bastantes canciones de este espléndido disco como “El camarero” con una letra a medias entre el humor y la amargura del personaje principal de esta pequeña historia ante lo cotidiano del trabajo o “Aquí nadie será azul” bebiendo de la misma fuente que “6000 millones” al igual que otras como “El último cigarrillo” o mi favorita, “Deduzco”, el homenaje de Daniel a Edgar Allan Poe que sin duda fué uno de los mejores momentos para el que escribe esto.
Pero no solo sonaron canciones de nuevo disco también pudimos escuchar sus clásicos de siempre como “Me gustaría ser mujer” que la baña y la da un nuevo sonido más rockero y a la vez con pinceladas de blues quedándole fantástica y lo más importante, fresca y renovada al igual que “me duele el cuello de tanto mirar las estrellas” que sinceramente me sorprendió gratamente o “Como un arbol” con ese deje flamenco que tampoco pierde aunque se renueve musicalmente. La pena fué que no sonara una de las mas deseadas por todo el mundo que es “El hombre cucaracha” aunque a cambio tendríamos “Fredie black”.Fantástico es poco.
Texto y fotos:Charly rock and roll