Después de dos EPs, Origen (2013) y Viral (2014), llega el primer álbum de Kitai, Que vienen. La banda, formada por Alex (voz), Fabio (bajo), Edu (guitarra) y Deiv (batería), contesta a nuestras preguntas antes de presentar este nuevo disco en El Sol el próximo 13 de noviembre.
¿Cómo os sentís después de haber terminado de grabar vuestro último trabajo?
FABIO: Estamos super contentos porque la acogida que está teniendo por parte de la gente es muy buena, no podría ser mejor creemos. Y en cuanto al trabajo realizado, el disco en sí, también estamos muy orgullosos, nos sentimos muy identificados con las doce canciones. Y estamos a tope ahora con todo lo que viene.
EDU: La verdad es que sí, estamos muy ilusionados; también ilusionados, sobre todo, por lo que está por venir ahora, que es toda la gira y demás. Con muchas ganas de trabajar, de seguir currando, y a tope.
DEIV: Me suscribo a lo que dicen ellos; estamos en un momento de forma muy bonito. Recién salido nuestro primer hijo, como quien dice, nuestro primer trabajo oficial; lo de antes han sido maquetas, EPs, no por menospreciarlo ni mucho menos, al revés, pero digamos que es lo que nos ha avocado a sacar el disco; han sido como las pruebas previas a lo que ahora viene, a lo de verdad. El otro día tuvimos una reunión con nuestro equipo y hablamos precisamente de esto: esto ya no es una prueba, hemos salido a jugar y hay que ir a por todas. Y la verdad es que lo hemos dado todo y lo hemos hecho lo mejor que lo podemos hacer con las cualidades que tenemos y el tiempo que se nos ha dado.
¿Cómo ha sido la producción? ¿Qué ha tenido de distinto respecto a la de los dos EPs?
FABIO: La verdad es que ha sido bastante nuestra la producción. Hemos trabajado todas las canciones, las estructuras y todo, en el local de ensayo. Y cuando ya teníamos eso hecho decidimos pulirlo, darle el barniz, y llamamos a Javier Palancar, que es un buen amigo y un gran músico, y nos ayudó con los arreglos de batería, guitarra, bajo, líneas vocales… las pequeñas pinceladas, los detalles. Nosotros hemos hecho las canciones, las hemos producido nosotros, y Javier Palancar nos ha ayudado. También en alguna canción nos ha ayudado Joaquín Pizarro, en V3ta.
DEIV: La mayor diferencia es que en los anteriores EPs sí tuvimos una ayuda en la producción y en este decidimos coger nosotros el mando, nos vimos capaces, nos vimos en forma, y lo hicimos. Javi se integró como uno más, en vez de ser un míster, fue uno más del equipo; nosotros lo sentimos así. Nos ayudó bastante, porque a veces es difícil, cuando llevas tanto tiempo trabajando en unos temas, coger un punto de vista objetivo, que es el que nos dio él. Le estamos muy agradecidos.
ALEX: Estamos orgullosos de poder decir que dos terceras partes del trabajo que ha supuesto el proceso de producción de este disco ha sido llevado a cabo por la banda. El tema de los arreglos nos llevó como dos meses o mes y medio. El resto, casi un año, fue todo trabajo de producción por nuestra parte. Cuando llevamos los temas, estaban mascadísimos, lo único que había que hacer era un par de arreglos, y eso nos hace sentir muy orgullosos, porque es un trabajo de equipo, un trabajo de muchas horas y mucha dedicación, y es algo que ha sido muy importante para el grupo y a nivel personal de cada uno.
¿Preferís esa etapa de composición, grabación y producción o la de salir a presentar vuestro trabajo en directo?
EDU: Todas. Todas tienen su parte bonita y su parte que hay que disfrutar. La parte en la que estamos encerrados en el local yo creo que los cuatro la disfrutamos mucho porque hacemos lo que queremos.
FABIO: Mientras van saliendo las canciones, te sale la sonrisita.
EDU: Pero también los palos. Tiene sus partes todo. Igual ahora, en la parte de salir a girar ves la reacción de la gente, ves que la gente te está apoyando, que le gusta; o que no le gusta, incluso; tiene su parte de la cual puedes aprender mucho y eso mola.
FABIO: Y tocar en directo es que nos flipa.
EDU: Claro, para eso es todo esto, para tocar.
ALEX: No nos quedaríamos con ninguna parte. Es lógico decir que somos una banda de escenario, pero también somos una banda de local. Todo lo que pasa en un local no es sólo ensayar: es componer, es producir, es todo esto. Así que ambas, nos quedamos con ambas.
Estáis comenzando esta nueva gira, ¿qué sentís al llegar a ciudades de toda España y ver que vuestra música emociona a gente a la que no conocéis y con la que no tenéis nada de ver?
FABIO: Eso nos lleva pasando desde siempre, desde que empezamos la primera gira; ves la reacción de la gente, que no siempre es buena, obviamente, pero cuando alguien se te acerca y te dice “Chicos, ha sido brutal”, es como que todo lo que has hecho ha merecido la pena porque una persona te está diciendo que le mola tu trabajo y te sientes super agradecido. Al fin y al cabo lo hacemos por eso, hacemos música para nosotros, pero si te quieres dedicar a esto y vivir de ello le tienes que gustar a la gente, y que la gente te diga que tu música es buena o que tocáis bien es una señal de que lo estás haciendo bien, como una palmadita en la espalda que dice “venga, sigue adelante”.
ALEX: No te puedes pasar la vida haciendo algo por una persona porque tú quieres que sea así; llega un momento en el que esperas que esa persona haga algo por ti. En la música es un poco parecido; nosotros subimos a un escenario y tocamos porque es importante para nosotros, pero desde el momento en el cual vemos que hay una respuesta y que la gente lo siente igual que nosotros, es cuando realmente llega a haber esa conexión y llega a emocionar. Por eso ir a distintos escenarios es aún más gratificante porque sabemos que son sitios inexplorados para nosotros, ciudades que aún no conocemos, que no sabemos lo que es Kitai ahí, y de pronto llegamos y hay muchos sitios en los que nos llevamos una sorpresa. Esa es la magia de tocar fuera. La magia de tocar en Madrid es que estamos con nuestra gente y estamos en casa. Tiene ahí un doble punto.
DEIV: Yo diría que nosotros somos como unos buenos chefs. Queremos que nuestra música la consuma el mayor número de gente, el disco lo enfocamos a este concepto: quizá cedimos en la parte musical para hacer algo más comestible. Sin perder nuestro estilo, nuestra esencia Kitai, pero sí queriendo lógicamente que nos consuma la mayor gente posible. Con el tiempo que hemos tenido, como ya he dicho, y las ganas que le hemos echado, hemos hecho lo mejor que hemos podido. Y la verdad es que el resultado está siendo acojonante: de momento 4ºs en rock en la primera semana y 25º en el puesto general [en iTunes]. Y críticas de todo tipo, pero siempre buenas, siempre constructivas hacia el buen camino. Yo creo que estamos muy orgullosos en ese sentido.
En esta gira vais a ir a ciudades a las que no habéis ido nunca…
EDU: En esta primera gira yo creo que casi todas son ciudades nuevas: Oviedo, Orense, Vigo, Barcelona, Tarragona, Granada… Vamos un poco ahí a la guerra, a ver qué pasa, esperemos que vaya alguien a vernos. [risas]
Estáis muy cerca de las bandas que comienzan, gracias al Club Mostaza estáis descubriendo a grupos jóvenes que también intentan hacerse un hueco, ¿cómo veis a estas bandas? ¿Qué se cuece?
FABIO: Es una alegría porque ves que hay un montón de gente joven que está tocando, y te llevas sorpresas, mola un huevo.
ALEX: Hay muchísimo movimiento, yo estoy viendo un movimiento acojonante de bandas, y además de todos los géneros, de chavales que se están apuntando a hacer las cosas en serio. Y eso a nosotros nos mola, porque nos sentimos muy identificados. Podríamos decir nombres, aunque es mejor que salgan por su propia cuenta…
DEIV: El otro día estuvimos en el Monkey Week precisamente tocando con algunas de bandas las bandas que ya habían pasado por Mostaza Club. Por ejemplo, Los Vinagres, de los que somos muy fans desde el primer día que les vimos en Mostaza, o 51 grados. Vimos a las dos y nos encantan. Como ha dicho Alex, hay máximo movimiento.
ALEX: Sí, o la banda Echo, que son chavales de unos 18 años y son una bandaza, muy jovencitos, pero flipas; y si siguen así y siguen currando van a llegar muy arriba. Así que sí, hay un movimiento muy interesante.
Ahora que habéis dicho lo del Monkey Week, contadnos un poco cómo ha sido…
ALEX: Muy bien. Para empezar ha sido guay, porque ha sido nuestra primera vez en Cádiz; de hecho en el sur es la segunda vez que hemos estado. Y el tema del festival también ha molado porque es una cosa muy curiosa, muy interesante; es un festival que se organiza de una forma diferente al resto y a nosotros nos sorprendió desde un principio. Nos gustó mucho la organización, cómo estaba montado, el rollo que había, todos los promotores, bandas emergentes, un cartel muy interesante porque la mayoría de las bandas no están en primera fila dentro de la industria. Tenías la oportunidad de curiosear y descubrir; yo personalmente aproveché para echar un vistazo al aire libre a algunos grupos, a ver cómo iba cada rollo. Nosotros tuvimos una acogida muy buena: llegamos ahí y no había nadie, probamos sonido y no había nadie, pero fue tocar dos temas y ya se estaba llenando la sala.
FABIO: Son la hostia estas iniciativas, porque dan pie a que un montón de gente te escuche, a ti y a mil bandas. Y a nosotros, como consumidores de música, también nos mola ir como espectadores, porque descubres a gente con un montón de talento.
ALEX: Siempre aprovechamos para echar un vistazo a lo que hay por ahí. Aparte de que muchas veces coincide que tocan bandas que tenemos ganas de ver, intentamos descubrir… Y el Monkey Week es una oportunidad muy guapa para eso.
Volviendo al disco… ¿De dónde viene esa obsesión por las líneas de las que tanto habláis?
ALEX: Es una forma de expresar lo que realmente para nosotros significa Kitai y lo que significa la música. Esto es un camino, es una línea recta, nosotros tenemos claro que vamos a seguir por esa línea recta sin encontrar un punto final y vamos a darlo todo durante el camino. Vamos a intentar sentir todo, sin pensar en ningún final, a disfrutar al máximo y darlo todo encima de un escenario. Eso por un lado; por el otro, la música tiene una serie de líneas musicales y viendo, por ejemplo, a Fabio tocar el bajo se ve que él siente lo que toca, las líneas que él está marcando en el bajo; al igual que a Edu y al igual que a Deiv. Y eso es muy importante, queremos que la gente se dé cuenta de que estamos encima de un escenario y no simplemente porque nos guste tocar, sino porque sentimos realmente la música que hacemos. Si no, la banda se habría disuelto hace mucho tiempo. Por muy bien que lo hagas, si realmente no sientes que eso te llena, no va a ningún lado.
Aunque vuestros temas siempre se han caracterizado por su energía, se nota una mayor crudeza y rabia en estas últimas canciones, ¿tiene que ver con el momento actual que está viviendo el planeta o es algo más personal?
FABIO: Quizá sea porque ese ha sido nuestro punto de cocción, por así decirlo. No sabíamos cómo transmitirlo hasta este disco, hemos intentado llevar este sonido y esta rabia a los anteriores trabajos, pero por unos motivos u otros no hemos sabido retratarlo. Con este disco estamos muy contentos precisamente porque nos sentimos totalmente identificados con su mensaje.
EDU: Claro, el sonido de Que vienen es más próximo a todo lo que teníamos en nuestra cabeza desde el principio. Yo creo que lo hemos conseguido; que no es todavía el definitivo, y seguramente en el segundo disco enfoquemos el sonido de otra forma, pero a día de hoy creemos que estamos muy próximos a nuestra idea.
¿Qué objetivos os gustaría alcanzar con este álbum?
ALEX: El objetivo… Esto es un mensaje importante de cara a lo que es Kitai: con este disco no tenemos expectativas, tenemos intenciones. Y hay una gran diferencia. Muchos de los objetivos si te los planteas y no los consigues puedes llegar a romperte la cabeza. Nuestras intenciones de cara a este disco son muy claras: seguir creciendo por todas las ciudades, seguir conquistando el alma de las personas que nos vienen a ver, que vuelvan a repetir; aunque haya sólo una persona que nos diga “seguid por mí”, lo vamos a hacer. Esa es una intención ya importante para nosotros; es algo que hemos hecho desde el principio y es algo que no va a cambiar por sacar un disco. Un disco conlleva otro tipo de responsabilidades más allá de lo que es una banda: a nivel de promo, a nivel de cómo te tienes que mover porque tienes más material, pero a nivel de banda la intención la cambia, la intención es dejarnos los huevos en todos los conciertos, darlo todo por el público, darlo todo por nosotros y estar ahí donde nos dejen estar. En ese sentido, es una declaración de intenciones por parte nuestra en toda regla. Que aquel que quiera ver a Kitai, que nos llame, porque para allá vamos. Queremos tocar, tocar, girar, girar, y que la gente escuche el disco. Esa es nuestra intención y esperamos que se convierta en un objetivo cumplido.
¿Cómo y dónde os veis en dos años?
ALEX: Creo que lo fundamental es que dentro de dos años nos veamos como nos vemos ahora después de dos años. Hemos aprendido muchas cosas, hemos creado un montón y hemos crecido como banda musicalmente de un forma increíble. Y esperamos que dentro de dos años esa progresión siga. Y los resultados van a llegar, porque todo es cuestión de trabajo, la suerte no existe. Si dentro de dos años no estamos donde otras bandas están, a lo mejor es dentro de cuatro o cinco años, pero sabemos que con el tiempo y con trabajo las cosas se van notando; y nosotros en estos últimos dos años lo hemos notado y no tenemos ninguna duda de que en los próximos dos podremos estar en un sitio mucho mejor.
DEIV: Yo creo que no sabemos el dónde, pero si sabemos el cómo. Y va a ser igual, con la misma ilusión, la mismas ganas, la misma fuerza, unión…
EDU: Yo creo que lo importante, da igual dónde, es que estemos los cuatro juntos, que haremos lo que queramos. Mientas estemos los cuatro juntos, si queremos conquistar el mundo [golpea la mesa] lo conquistamos. [risas]
ALEX: Desde la total sinceridad, Kitai es una banda que si estuviéramos en este punto en el que estamos, pero Kital musicalmente y artísticamente fuese otra cosa, tendríamos otras expectativas. Pero estamos viendo que la gente y los medios, independientemente de que les guste o no les guste, no saben ubicar a Kitai. No saben si es una banda de rock, de metal, de pop, de funk… Porque Kitai es algo muy poco frecuente dentro de la escena; de hecho, creo que es la única banda que hace algo así ahora mismo. Entonces hacernos expectativas y ver lo que va a pasar en dos años con un proyecto tan bonito como este, es algo incierto. Así que, como dice Deiv, no sabemos dónde, por todos estos elementos, pero sí la forma, el cómo, y eso es lo que nos vamos a limitar a ver.
Deiv, has estado ahora en Miami con tu proyecto paralelo a Kitai… Cuéntanos.
DEIV: Muy bien, la verdad. Es algo paralelo a Kitai, pero yo lo uno, en las redes cualquiera que me siga lo puede comprobar. Uno el proyecto de Deivhook con el de Kitai, interactúo con los fans y redirijo el flujo de interacción de ambos proyectos. Hace poco surgió la oportunidad de abrir mercado allí con Deivhook y, tras varias reuniones con una pequeña agencia de comunicación, me decidí a dar el paso. Hemos hecho una primera fase de asentamiento y la verdad es que estoy super contento. Me ayudó a oxigenarme también, porque la industria en España tiene bastantes guiños y dejes e todos los ámbitos; y ver nuevos mercados, aunque vayas a currar, refresca. Vine con miles de ideas y miles de cosas que hacer y que aplicar. No puedo dar más detalles aún…
¿Cómo está siendo la promo de Que vienen?
FABIO: Hasta el momendo estamos en la Mondo, en la Metal Hammer, en la Heavy…
DEIV: Tuvimos una reunión con todo el equipo para evaluar cómo había sido la primera semana de lanzamiento. Entrebotones había movido todo por igual y era curioso ver las reacciones de revistas dependiendo de su estilo.
FABIO: Estaba más receptiva la gente del rock y el metal que la del indie, por ejemplo.
DEIV: Eso es algo que no nos pasa en los festivales, donde a recepción suele ser de la polla en todos los lados.
ALEX: El resultado que se está viendo hasta el momento a nivel de promo está siendo satisfactorio. Para empezar, a los medios, sean del tipo que sean, cuando les llega algo de Kitai, ya les suena que hay una banda por ahí que está tocando las pelotas y que encima va con intención de querer reventarlo. A partir de ahí, algunos medios, te permiten aparecer porque les mola, y otros no, porque en ese momento a lo mejor tienen otro montón de cosas que les gustan más, y eso nos parece lógico.
FABIO: También creemos que eso se debe a que el tipo de música que hacemos no ha sido muy usual en España ni en castellano, así que es normal que al principio algunos miembros estén reacios, pero suponemos que eso puede cambiar con el tiempo.
ALEX: Y es normal. Somos conscientes de que cada medio es un negocio y dentro de un negocio hay tendencias. Si hay que trabajar con esa tendencia y de repente un grupo de chavales empieza a tocar los cojones sin medios, sólo con redes sociales, tú lo que piensas es una de dos: o les apoyo, o espero y ya les apoyaré cuando estén más arriba. En cualquier caso, nosotros nos sentimos acogidos por todos los medios y tenemos trato con todos; nosotros les estamos ofreciendo nuestra música para que ellos puedan utilizarla a través de su negocio y ver si le funciona o no. Es respetable, igual que cuando ofrecemos nuestra música en directo: una persona puede venir o no, o decir que le gusta o puede decir que le parece una puta mierda lo que hacemos.
¿Y por qué habéis elegido esta vez una foto para promocionar vuestro trabajo en la que sale Fabio en primer plano, cuando hasta ahora solía salir Alex?
FABIO: Fue una foto puntual de las que hizo Sergio López que nos gustó mucho.
ALEX: Mola también cambiar de disposiciones. Estaría guapo, por ejemplo, en un escenario poner la batería delante y el cantante en la tarima detrás.
EDU: Yo creo que también es un guiño a que somos un grupo, que no es un cantante y su banda, que somos un grupo de verdad.
¿Qué vamos a ver en la Sala El Sol, un año después?
EDU: Más potencia todavía que el año pasado. Más conjuntado, más ensayado todo, más mascado.
DEIV: Aparte de nuevos temas, obviamente. El show es diferente, tenemos también mucha más madurez musical. Si echamos la vista atrás han pasado fácilmente unos 60 conciertos por nuestros cuerpos este año, y eso se nota. Nos quedan muchísimos más, pero esperamos sorprender. Tenemos nuevas cosas pensadas de cara al show, no ya en la parte de performance, sino también en partes musicales. Y es uno de los conciertos de los que más ganas tenemos. También nos está siendo mucho más fácil a la hora de vender entradas, el volumen de anticipadas ha doblado ya al del año pasado. Aprovechamos para animar también a todos los que lean la entrevista a venir y descubrir lo que es Kitai en directo, porque van a ver algo que nunca han visto.