Cinco años han pasado desde que los sevillanos más irreverentes del panorama nacional sacaron su último álbum con material original, aquél insustituible ‘Alita de Mosca’. Ahora, tres discos de versiones después, más rodados, más enfadados y más metódicos han vuelto Narco, la banda de rap metal más importante del país. En Musicópolis decidimos pasar un rato con ellos para preguntarles por qué Dios nos odia tanto.
Como vosotros mismos habéis dicho muchas veces, Narco es un grupo de directo, puesto que sobre las tablas es donde más os lucís. Pero en vuestros discos se ve, y cada vez más, el importante trabajo compositivo que hay detrás. ¿Podríais contarnos un poco de cómo funciona Narco en este sentido?
Vikingo: La verdad es que estamos acostumbrados a componer todos juntos en el local. Los músicos hacen sus bases para las canciones nuevas, nos enseñan sus ideas musicales y a partir de ahí nosotros (Vikingo y Distorsión) escribimos las letras. Incluso a veces aportamos ideas musicalmente. Es un trabajo conjunto.
Distorsión: Y nosotros dos escribimos juntos, a lo mejor cosas puntuales las hacemos por separado, pero no es lo habitual.
Reconozco que me ha sido difícil encontrar preguntas que hacerle a un grupo que en sus letras ya parece decir todo lo que tiene que decir…
Vikingo: (interrumpe) Tienes razón, no tenemos pelos en la lengua la verdad.
Habláis de drogas, religión, asesinatos…pero llama la atención que apenas aparece política de actualidad en vuestros temas. ¿Por qué?
Vikingo: Eso es porque no creemos en la política.
Distorsión: Bueno, eso serás tú (ríe). Yo tengo mis ideas políticas, pero personalmente a la hora de la creación artística no me gusta ser tan explícito, prefiero que las cosas tengan que interpretarse un poco. Además con Narco nos basamos más en sensaciones, en el día a día, en la ruina que se vive a diario…. Narco se centra más en el universo personal.
Vikingo: También porque cada uno tiene una visión política, no compartimos las mismas ideas. Al igual que cada uno cultiva un género musical diferente y a partir de ahí sale lo que sale con el sonido de Narco, políticamente pasa algo parecido. Hay muchas ideologías dentro del grupo y al final son cosas personales que no tratamos de meter en la canción.
Como sabréis se acaba de redactar la Ley Mordaza, que controlará las concentraciones de personas que ocupen la vía pública. ¿Creéis que esto va a afectar a las hermandades de Sevilla?
(Risas).
Vikingo: En absoluto. Ni a la feria.
Distorsión: Mira, mi casa está en el centro de Sevilla y yo lo vivo de primera mano. Esta gente actúa impunemente, las hermandades te despiertan a la hora que les da la gana, te impiden acceder a tu casa, aparcar durante cinco días…Y cuando se intenta llevar una alternativa cultural al barrio no encuentras nada más que trabas. Como músico y DJ siempre que he pinchado o actuado en la ciudad han terminado por cortarlo. En Sevilla hay un monopolio cultural por parte del mundillo de la Semana Santa. Pero siempre hay un lado positivo, y es que cuando hay un monstruo de este tamaño acaba por surgir una respuesta. Y eso se ha visto en la actividad contracultural de Sevilla de los últimos treinta años.
Vikingo: Pero bueno. Sigue siendo una ciudad clasista y antigua.
¿Realmente es tan asfixiante el ambiente Sevillano como reflejan vuestros temas?
Distorsión: Sí. Pero no hay que olvidar que aunque no lo reflejemos tanto en las canciones, la respuesta de la ciudad sigue ahí. Hay un importante movimiento contracultural como reacción ante ese monopolio que se inclina sólo hacia un lado. Como la parodia, siempre ha habido parodia.
Vikingo: Pero está claro que a esta gente la están amarrando las manos, cada vez hay más represión policial. Es habitual que de pronto a la una de la mañana la policía haga barrida y las calles se queden vacías, sin nadie. Cada vez hay menos libertades.
Distorsión: En el barrio de la Alameda, por ejemplo, antes podías pararte y estar a gusto con la guitarra. Esto forma parte de la vida cultural de la ciudad. Ahora no se puede hacer nada, hay constantemente cuatro o cinco motos policiales molestando por la calle, cacheando, pidiendo los papeles a gente que está tranquilamente con un amigo… Intentan transformar la ciudad. Pero la gente se va a buscar las maneras, porque no puedes luchar contra la cultura grandísima que hay de vivir en la calle.
Vikingo: Nos quieren londonizar, que todo el mundo haga las fiestas en su casa y punto, como en Europa. Pero esto es Sevilla, tenemos un clima africano, no del norte. La calle exige que tú estés en la calle.
En este sentido, ¿a lo largo de los años os ha sido más fácil actuar en el norte del país?
Vikingo: Por supuesto. Siempre hemos tenido abiertas las puertas del norte, desde primera hora.
Tocamos mucho más fuera de Andalucía que dentro, donde Narco está un poco vetado debido a su nombre, a sus letras. Por culpa de la iglesia, los medios, los partidos, esas cosas…
Distorsión: Si cuando nosotros tocamos en Andalucía va un montón de gente a vernos, y flipa. Pero no nos contratan mucho, no hay la misma industria que la que puede haber en Madrid. En Sevilla hay músicos por un tubo, pero la industria está menos desarrollada que en el norte, apenas hay promotores de rock. Es difícil. Para otro tipo de géneros, como la electrónica o el rap, es todo mucho más fácil y eso se está notando en la escena.
Pero vosotros ahora os autogestionáis, ¿no?
Vikingo: Sí, todo. Discos, merchandising, diseños, producción… Menos el rollo de la oficina que lo lleva Bola 9, y nuestro colega Chema que es promotor. Esas son las únicas personas externas, porque realmente monitorizamos todo. Y ese es el futuro de casi todos los grupos
Distorsión: Hay gente que se ha quedado sin saber muy bien qué hacer, pero, ante el declive de la industria, nosotros vimos claro que era el momento de autogestionarnos todo. Controlamos el proceso. Por otra parte somos un grupo que ha tenido muchos problemas con discográficas. Ahora nos hemos encontrado cómodos haciendo todo por fin como nosotros lo queremos hacer. Que nos equivocaremos, pero por lo menos no hay nadie que nos diga: “tenéis que hacerlo así”.
Hablemos del disco nuevo. ‘Dios te Odia’, como título. ¿Habéis recibido ya alguna “llamada amistosa” al respecto?
Vikingo: No. Lo que queremos con el título es transmitir a la gente creyente (porque nosotros está claro que no creemos en ningún dios) que Dios les odia. Dios os está puteando desde hace muchísimo tiempo. Si no pregúntale a esos niños que han sufrido los abusos de los funcionarios del cielo durante cientos de años. La iglesia ha hecho estragos, desde la aniquilación de los indios a quemar gente en hogueras.
Distorsión: Pero lo de “Dios te odia” yo también lo veo como “la vida es una mierda”. Más allá del tema religioso, representa ese momento de la vida en que todo te va mal.
Vikingo: Un intento de abrir los ojos a la gente. Hay quienes están pasando penuria, no tienen comida, los echan de su casa, y siguen creyendo en Dios. Y es un poco para decir: “mira, yo sé que necesitáis un apoyo moral y creer que haya algo después, pero…si había algo mira cómo te están tratando ahora.”
La música de Narco se define por ser un conjunto de influencias varias. ¿Vamos a encontrar algo nuevo en este disco, ha habido influencias nuevas en su sonido?
Distorsión: Sí que hay algo nuevo, hemos cambiado algunas cosillas. En “Por el estrecho” por ejemplo hemos metido arreglos nuevos, instrumentos que no habíamos escuchado nunca, con el Mangu de los Rure Folk.
Vikingo: Es un muy buen músico sevillano que toca prácticamente todos los instrumentos de cuerda. Le conocíamos desde hace mucho tiempo y nos ha ayudado metiendo influencias de rollo árabe.
Distorsión: Por otro lado, en todos los discos de Narco hay electrónica. No todos los miembros del grupo la escuchan, pero los que sí lo hacemos vamos viendo cómo son las cosas nuevas y nos han influenciado. Por otra parte también hemos querido reivindicar el breakbeat andaluz, hemos metido bastante y me mola el resultado. El rollo que se escuchaba en Andalucía en los 90 nos marcó mucho, y en este disco hemos querido resaltarlo un poco más.
Vikingo: Con el tema de la electrónica nos han ayudado mucho, también.
Eso os quería preguntar. En los últimos años habéis colaborado con un amplio número de artistas, pero con los también sevillanos Dub Elements repetís en ‘Dios te Odia’. ¿Os gustó especialmente el resultado anterior?
Distorsión: Los Dub Elements son promotores de la escena electrónica de Sevilla. Yo no me identifico con todo lo que han hecho porque en su carrera han tocado muchos palos, pero sí es verdad que a la hora de trabajar juntos tenemos un feeling muy bueno. Cantando en solitario también he hecho cosas con ellos y los resultados siempre han sido perfectos. Cuando grabamos temas los Dub Elements entienden muy bien lo que queremos hacer nosotros. Son muy versátiles y eso es lo que Narco necesita, alguien que sepa entendernos y que pueda adaptarse.
Vikingo: Además que ya nos hemos hecho colegas. En Narco intentamos trabajar siempre con gente que sea muy cercana. Si hacemos un vídeo, una canción, el diseño gráfico…nos gusta colaborar con amigos de siempre.
Hacía ya cinco años que Narco no sacaba un disco con material nuevo. ¿Es por perfeccionismo?
Vikingo: Por perfeccionismo y porque se metió por medio el proyecto con Reincidentes, las versiones…
Distorsión: Se nos fueron ocurriendo otros proyectos divertidos de por medio.
Vikingo: Se juntaron tantas cosas que al final hemos tenido que hacer el proyecto a largo plazo. Nos ha costado muchos años, pero creo que cada vez trabajamos más seriamente. Al final es importante marcarte unas fechas y cumplirlas, y hacer un trabajo de calidad por la gente. Por serle fiel a la gente. Este disco lo hemos hecho más metódico y más calculado.
Aún así en este tiempo han visto la luz ‘La Rave del Infierno’, ‘Versiones para no Dormir’, ‘La Sevilla del Diablo’, y ahora por fin ‘Dios te Odia’. Estáis en un periodo muy prolífico, ¿no?
Distorsión: Hombre, este disco ha costado más que las versiones, evidentemente, que son más divertidas de hacer y mucho más fáciles. Por eso ha habido tres discos de por medio. Realmente desde ‘Alita de Mosca’ no habíamos sacado nada nuevo, pero también hay que decir que fue un disco en el que el grupo volvía después de un parón. Uno venía de estar en Londres, yo me acababa de unir al grupo, y había un montón de ideas nuevas. Ahora hemos tenido que esperar cuatro años para poder vivir cosas y recargar un poco esa barra de las ideas. Cuando hemos creído que estábamos listos para hacer un nuevo disco, lo hemos hecho.
Vikingo: Y ahora nos queda pendiente el disco en directo, que ya se hará.
A estas alturas no os hace falta vender vuestros directos, pero contadnos, ¿va a haber alguna novedad en esta gira?
Distorsión: Sí que verá la gente algo nuevo, estamos mirando un par de cosillas para acompañarnos, pero no podemos decir nada porque estamos en ello todavía.
Vikingo: Además siempre hemos ido dejando muchas cosas en el tintero cuando hemos trabajado en nuestros discos, así que puede haber sorpresas de que saquemos algo que no se ha oído aún…pero el directo seguirá siendo totalmente Narco.
Este mismo año habéis tocado en Londres, dos noches seguidas si no me equivoco. ¿Cómo fue la experiencia?
Distorsión: Sí, dos largas noches en Londres. Aunque el público eran colegas de aquí sobre todo, había algún guiri pero… (ríe)
Vikingo: Iba a ser una sola noche pero se lió todo muy rápido y acabaron siendo dos. Además tocamos con un grupo de Edimburgo del que un componente era de Sevilla, y el resto llevaron a sus amigos de la ciudad. Una experiencia muy chula.
Distorsión: La experiencia fue de puta madre, fue un concierto muy especial de los que sales contento porque la gente lo ha dado todo. Y ahora estamos mirando para ir a Alemania también. En 2015 nos gustaría estar en otros países: Holanda, Alemania…y el tema Sudamérica, que lo tenemos pendiente. Siempre estamos intentándolo, pero somos unos muertos de hambre y es muy caro ir hasta allí. Realmente nuestro Facebook tiene más seguidores de México que de España, pero aún así no podemos permitírnoslo, siendo sinceros. Cuando sea posible iremos para allí porque ya es una cuestión personal.
Como grupo asiduo al Lumbreiras, supongo que os habréis enterado de que el festival ha echado el cierre. ¿Qué os parece?
Vikingo: Claro que somos asiduos, hasta hemos trabajado allí. Es una pena, pero bueno, a mi buen amigo Marcos Rubio (organizador y responsable del Aúpa Lumbreiras) también le viene bien un barbecho, hacer algo diferente, y ya lo retomará. Este hombre yo sé que es un luchador nato y está acostumbrado a nadar contracorriente hasta recibiendo amenazas, pero siempre termina tirando pa’lante. Que tiene los huevos cuadrados, vamos. Este hombre es el ave fénix. Desde aquí un saludo muy grande, Marcos.
Ya hace siete años que Narco se ha vuelto a reunir, y muchos dicen que realmente estáis en vuestro mejor momento: sacando discos, girando…¿os sentís vosotros así?
Vikingo: Sí, somos más viejos pero sí.
Distorsión: No sabemos cuánto va a durar este momento porque somos muy golfos, pero sí es verdad que ahora mismo estamos en un momento realmente bueno. Estamos con todas las ganas, dándolo todo, sabes, y no sabemos cuanto tiempo vamos a poder aguantar con este ritmo, pero estamos al 100%.
Vikingo: Son unos putos cuarentones (ríe).
Muchas gracias por vuestro tiempo y os deseamos lo mejor para la gira de este 2015. Si queréis decir algo…
Vikingo: Por supuesto. Madrid, que el día 28 de Febrero nos vemos en la sala Independance, y allí liaremos el pepino como espera la gente.
Narco comenzará la gira “Dios te odia” el 30 de enero de 2015 en Bilbao, y recorrerá toda la península en tan sólo unos meses. Ya hay 17 fechas confirmadas para el tour de rap metal más esperado de los últimos años.
Puedes conseguir tu entrada en taquilla.com.
30 de enero, sala Stage Live de Bilbao
31 de enero, sala Station Groove de Alcázar
6 de febrero, sala La Bóveda de Barcelona
7 de febrero, sala Gossip de Villareal
20 de febrero, sala Ego de Huelva
27 de febrero, sala Porta Caeli de Valladolid
28 de febrero, sala Independance de Madrid
6 de marzo, sala El Tren de Granada
7 de marzo, sala Rock City de Valencia
13 de marzo, sala Garaje Beat de Murcia
14 de marzo, sala Marea Rock de Alicante
20 de marzo, sala Eventual de Málaga
21 de marzo, sala Mercantil de Badajoz
10 de abril, sala Jimmy Jazz de Vitoria-Gasteiz
11 de abril, sala Studio 54 de León
24 de abril, sala O Túnel de A Coruña
25 de abril, sala La Fábrica de Chocolate de Vigo