Carpe Diem es el título del segundo álbum de Hormigón Armado, banda procedente de Cataluña y en activo desde 2005.
Sus parámetros encajan perfectamente en la definición de metal pero sin decantarse hacia subgénero alguno, nutriéndose, principalmente, de perfiles procedentes tanto del thrash como del hardcore, con alguna superflua concesión de influencia “numetalera”.
Destaca sobremanera el corrosivo sonido de los riffs guitarreros y su dinámica marcada por los trazos de textura rugosa. Ambas características conceden a Carpe Diem una compacta aspereza, tal como se puede comprobar desde el inicio con la trilogía compuesta por “Siempre Hubo Alguien”, “Radiació” (uno de los tres cortes que cantan en catalán) y “El Monstruo De Mi Armario”.
“Fart”, otro de los temas en catalán, en el que colabora Juanra de Kop, mantiene las mismas premisas que los anteriores aunque con una orientación más acelerada; mientras que en “Carpe Diem”, también en catalán, Hormigón Armado demuestran que saben introducir variaciones para evitar la reiteración de fórmulas; primero por la introducción de partes vocales limpias contrastando con las agresivas y, segundo, por el aporte solista de la guitarra, sin menospreciar su pegadizo ritmo, algo que también encontramos en la vitalista y fugaz “¡OJalá!”.
La dualidad vocal vuelve a estar presente cuando le toca el turno a “En Punto Muerto”, otra pieza en la que la guitarra solista cuenta con su momento de protagonismo; mientras tanto, en “Tarde De Garaje” la batería deja una permanente huella tanto con el bombo como con los tambores, además de aparecer una delicada melodía acústica de guitarra que impone un inciso de sosiego dentro del dominio de los rasgos abruptos.
Las excelentes vibraciones que destila el álbum ganan consistencia en el tramo final, donde se localizan, quizá, las mejores composiciones de la grabación. “Ansiedad”, con una excelente labor vocal compartiendo espacio con la visceralidad instrumental, cuya “vuelta de tuerca” la encontramos seguidamente en “El Juicio Final”, donde un persistente riff se funde eficazmente con el desgarrado registro vocal y sugestivas partes solistas de guitarra, todo arropado por un ritmo incesante y contagioso; receta que repiten y mejoran en la despedida con “Resurrección”, con sorpresa final a descubrir si se tiene paciencia.
Un trabajo punzante de sonoridad cavernosa apuntalado en una expresiva crudeza, sin menospreciar desviaciones creativas de construcción disciplinada, en el que se detecta la sintonía de Hormigón Armado con bandas del tipo Ktulu.
CALIFICACION: 7,50/10
GRUPO: Hormigón Armado
TITULO: Carpe Diem
DISCOGRAFICA: Maldito Digital
AÑO: 2011
PAIS: España
CRITICA REALIZADA POR LOCKY PEREZ