Descubrí a Kiuas en 2008 cuando lanzaron su tercer álbum The New Dark Age y desde ese momento pasó a ocupar un lugar destacado dentro de mis particulares preferencias por un motivo principal, se trata de una banda de amplios horizontes estilísticos en los que caben referencias de la más variada procedencia. De esta forma, sus composiciones suelen convertirse en encrucijadas sonoras donde el metal de adjetivos como power, folk, thrash o prog, están estrechamente vinculados con inusitada imaginación.
Es una pena que una formación como la finlandesa no acapare la atención de los medios especializados como se merece ya que atesora mucha más calidad que otras que sí tienen un mayor respaldo de la prensa con menos argumentos para merecerlo. De hecho, es difícil encontrar una reseña del disco en revistas españolas e, incluso, en las webs con mejor posicionamiento online. Así que, desde aquí, les vamos a hacer justicia.
Lustdriven, es su nuevo álbum, posiblemente menos agresivo que el anterior, pero igual de atractivo porque la esencia de su personalidad, que es la de ofrecer diversidad, se mantiene intacta.
Con unas bases asentadas en el metal como principal punto estructural, los giros esquemáticos pueden transportarnos hacia las fronteras del power, incluyendo alguna que otra filigrana a base de escalas guitarreras y con sugestiva presencia de teclados, incrustados con una maestría determinante para conseguir atmósferas cargadas de vitalidad. Pero también apuestan por las incursiones más agresivas con acercamientos a las aristas procedentes del thrash, con riffs musculosos y requiebros vigorizantes, sin olvidarnos de una vocalización versátil que igual surge amenazante como apaciguadora, además de contar con el apoyo de unos coros de perfiles épicos, sin llegar a la grandilocuencia trasnochada.
Bajo estas premisas, cada canción cuenta con su propia identidad en un contexto de libertad que incide positivamente en el resultado final. Así, el inicio resulta trepidante con “Kiuassault”, donde, en una base thrash se incrustan sonoridades folkies, de lo más desequilibrante del disco cuando irrumpen unas incendiarias guitarras y sugerentes adornos de teclados. Igual de potente resulta “Cry City Angel”, con sus coros pegadizos, mientras que en “Of Love Lust And Human Nature” se tornan más oscuros, aunque sin perder fuerza. “Aftermath” ratifica sus vínculos con el metal contundente y su capacidad para los requiebros dinámicos y las guitarras abrasivas, genialmente apoyadas por una batería de pegada compacta.
“Lights Are Many”, pone de manifiesto amplitud de ideas abordando los momentos sosegados de seductor sentimiento, piano incluido, además de un excelente trabajo vocal, al igual que en la semiacústica de aromas folkies “Summer’s End”.
El escenario sufre un radical cambio con la majestuosidad de “The Visionary”, con los teclados acaparando protagonismo. “Hear And Will” y “The Quickenin”, repiten virtudes para mantener la grabación a un nivel de excelencia envidiable, que se despide con “Winter’s Sting”, otra dosis de magistral inventiva.
CALIFICACION: 9,25/10
GRUPO: Kiuas
TITULO: Lustdriven
DISCOGRAFICA: Spinefarm
AÑO: 2010
PAIS: Finlandia
CRITICA REALIZADA POR LOCKY PEREZ