Luter, seudónimo de Eduardo García Martín, el que en su día fue guitarrista y voz de Los Reconoces, decidió emprender un nuevo proyecto musical que porta el mismo nombre que su seudónimo.
Luter sacó a la luz su primer disco, Añicos, el 30 de Octubre de 2008, en el que se puede considerar un proyecto muy ambicioso con el que ha conseguido a más de uno de nosotros.
Así, el trío: Luter (Voz y guitarra), Fauno (Bajo y coros) y Jandri (Batería) se confirma como una de las promesas del Rock estatal, y, tras la buena acogida del público, se preparan para llevar a cabo una gira dentro de territorio estatal.
Tracklist:
Análisis:
Al escuchar un trabajo así poca gente se imagina que sólo hay tres personas para tocar todo lo que estás oyendo, y es que es una auténtica pasada. Sin duda alguna, para ser el primer CD la calidad es altísima sobre todo destacando algunas canciones.
Esperpento, letra trabajada y un ritmo pegadizo (tuve está canción semanas en mi cabeza), El Tiovivo es algo más dura que la anterior, pero con un ritmo más calmado, pero seguimos destacando la voz magnífica de este hombre, que demuestra que también sabe tocar la guitarra genial en canciones como La Cola, o Fin una canción mucho más rítmica que las demás con cambios de velocidad.
En Los Cíclopes También Tienen Corazón hay como un acuerdo entre voz y guitarra, para ir alternándose y completando poco a poco la canción, mientras el bajo, como en todas las canciones del disco está muy acertado. Barata Mi Filosofía, canción triste y lenta, con guitarra acústica, es la manchita de un CD con canciones muy alegres.
A Granel es de nuevo una pasada, una de esas canciones que todo el mundo canta en los conciertos, magnífica; Entre La Maleza tiene un algo que difícilmente puedo describir, pero que me engancha, digo yo que será el conjunto del todo.
Arrabales, con una letra clara y directa es lo que más destaca de la canción, además de la batería que hace que parezca mucho más llena. Objetos Perdidos un ritmo muy chulo, diferente a las demás, una introducción muy diferenciada, cuyo ritmo se mantiene durante el tema. De Ida la verdad, es que la canción en sí no me gustaba mucho, parecía algo cansina, hasta que llega el estribillo, con un cambio radical, de nuevo muy bien.
Y para acabar Hoy Voy, de nuevo guitarra acústica, lenta pero con ritmo, quizá no la habría puesto como final del CD, pero esto no soy yo el que lo decide.
Opinión:
Pues, que decir, me deja un poco sin palabras; un gran trabajo, merece la pena echarle, al menos, dos oídos, no uno. No dudo en que algún día estas canciones estarán sonando mañana y tarde en la radio como lo hacen ahora los éxitos de décadas pasadas.
Siento que son canciones muy orientadas al público, por lo que intentaré acudir a algún concierto, porque no dudo en que merecerá la pena ver a estos tres artistas que tocando parecen veinte.
Por el momento, creo que voy a dar una de las notas más altas en todas las críticas que he hecho, y sin duda, un disco que supera en muchísimos sentidos a otros que he escuchado de artistas ya confirmados mundialmente.
Álvaro
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