Artista: Marvin Green
Título: Los días de Lowerside
Sello: Autoproducido
Fecha de publicación: 2011
Más información: http://www.marvingreen.com

Listado de canciones:

He perdido la cabeza
Mire
Dentro de mí
A.H.E.A.
Salvando esta canción
Horas de rock
Pasajero
Ahora
Los infiernos
Perfectamente raro
En mis pulmones
Caravanas

Marvin Green es el disfraz unipersonal en el que se embutieron tiempo atrás cinco artistas sevillanos. Queco Kabariti, Arturo Giner, Héctor Giner, F.J. Curra y Simón Velázquez publicaron a finales del año pasado su primer álbum: Los días de Lowerside, una obra de las denominadas de presentación. Anticipándose a las previsibles etiquetas de aficionados, melómanos, periodistas, críticos y bloggeros, la formación define a su estilo, en formato avanzadilla, cómo ‘la combinación del sentimiento del soul, la frescura del funk y la fuerza del rock‘.

Bajo esa premisa se nos presenta un disco de doce canciones interpretadas en castellano en el que la libertad de creación y distribución ha rehuido a sellos y distribuidoras con un resultado cualitativamente notable. Desconozco si éste hecho ha respondido a una decisión premeditada o a una realidad enfrentada, perdón, encontrada, pero la materialidad es el resultado y ante eso no cabe discusión alguna.

Notable también es el cuidado y mimo que estos chicos han puesto en todos y cada uno de los detalles, tanto en el proceso de producción cómo en el de masterización. Para lo primero recurrieron a Ramiro Nieto (The Right Ons, Jet Lag), mientras que para lo segundo el desplazamiento no se limitó a unos pocos kilómetros. Pensando en lo mejor para su sonido, la formación puso ese disco embrionario camino de Boston, con dirección a los estudios Q Division, los mismos que han trabajado con Franz Ferdinaz y con Eli “Paperboy” Reed. ¿El resultado? Un disco cuyo sonido se puede resumir en esas dos palabras en la que la segunda acaba en madre y la primera puede serlo.

Mencionada y acentuada la calidad profundizaré ligeramente (si se me disculpa la valiente contradicción) en lo que a la valoración musical se refiere. Pese a las influencias anglosajonas de los miembros del grupo, el álbum tiene una esencia innegable del rock’n’roll latino de finales de los 70 y principios de los 80; una esencia que se recupero con Los Rodríguez en general y con Calamaro en particular, para luego reforzarse con mayúsculas con M-Clan. Con ellos comparten esa apuesta por el rythm’n’blues con permanentes guiños al funky, además de una más que adecuada voz ronca para la interpretación de los temas. ¿Pero de dónde bebe el rock latino de esa época? Y aquí yo me voy a las suyas, porque hay peces que se muerden la cola, que me lo han dicho.

Resumiendo, que es gerundio: novedad y frescura difícilmente encontrará en éste disco quien se dedique a la busca y captura de estos términos tan esquivos. Salvando ésta extendida premisa, nos encontramos ante un buen álbum que demuestra que dentro del rock’n’roll estatal las cosas pueden hacerse, no sólo correctas, sino bien. Y para Marvin Green colocar un Muy delante del término sería lo justo… y necesario.