Se dice eso de que segundas partes nunca fueron buenas. También lanzan pedradas contra aquellos que siguen una norma establecida… pero pocos son los que logran hacer una continuación tan buena y merecedora de elogios. Los vigueses Maryland se sienten dichosos con “Get cold feet“, una dignísima hermana de “Surprise” (Ernie Records, 2009) que ha permitido a sus seguidores tener un motivo de orgullo y a ellos mismos para sentirse realizados con tal de seguir hilando más y mejor.
Las canciones de esta segunda parte atrapan y emocionan. Exudan pop (del bueno y del bonito) por cada segundo y encima, para colmo, Jaime Gª Soriano ha sido quien manejaba los mandos de la producción. Podrían sonar un poco a Sexy Sadie, pero esta afirmación sería tirar por el camino sencillo. Lo correcto sería confirmar que Maryland toman el relevo del power-pop sencillo pero potente a la vez, que tantas glorias dio en su tiempo a los mallorquines. Si buscan referentes que no tengan nada que ver con lo nacional, pueden ir al continente americano y dar con Weezer si así lo prefieren. Temas como ‘Red boots‘ y ‘Atom bomb‘ despuntan por encima de los demás, teniendo a ‘25 Springs‘, ‘For me today‘ y ‘Every moment‘ peleando (a base de distorsiones y riffs claros) por llegar al clímax.
Con ‘It works‘ la formación gallega hace saber que controlan lo que hacen y puestos a pedir, buscan la bandera que les conduzca a un tercer eslabón más, dejando las puertas abiertas a la llegada de ‘Little Miss Sunshine‘.
Ojalá (y así sea) que Rubén, Pablo, Iván, Arturo y Jaime sigan proporcionando música -pues al fin y al cabo es lo que hacen- e impolutas guitarras hasta arriba de chorus durante lo que queda y para los restos.
Amén.
Texto: Charly Hernández