Hasta entonces, la música de Metallica, a pesar de los evidentes cambios estilísticos que mostraban en su quinto álbum de título homónimo, no había sido cuestionada en exceso. En 1991, por fin habían conseguido alcanzar el número 1 en las listas del Billboard. No se podía llegar más alto y, efectivamente, no lo hicieron porque había llegado la hora del cambio, de buscar otras alternativas y “nuevas rutas de expresión”, según declaraciones del propio Lars Ulrich.
Después de haber dejado pasar cinco años sin entregar un disco de estudio, el tiempo más extenso desde su debut discográfico, sorprendieron al mundo con la edición de Load, el primero de los tres “álbumes malditos” que salpicaron su intachable carrera y al que siguieron Re-Load y St. Anger, convirtiéndose en su período más polémico, del cual trata esta serie de artículos.
RELOAD
Después de haber dedicado la primera de esta serie a Load. Le toca el turno a ReLoad, lanzado al mercado en 1997, a poco más de un año del anterior, marcando un evidente continuismo, es decir, más de lo mismo ya que, como es sabido, la intención del grupo era publicar Load y ReLoad como un álbum doble.
El mimetismo llegó a tal punto que para la portada se volvió a utilizar una obra del mismo artista, Andrés Serrano, en este caso formada a base de orina y sangre titulada adecuadamente… “Piss And Blood”, resultando igual de insustancial que la anterior. El álbum, también alcanzó el número uno del Billboard vendiendo 4 millones de copias. Indudablemente, eran otros tiempos.
También fue el último álbum en el que participó Jason Newsted, quien desde su entrada en la banda estuvo marginado en el aspecto compositivo contribuyendo en escasas ocasiones, su firma apenas aparece en “Blackened” (…And Justice For All), “Mi Friend Of Misery” (Black Album) y “Where The Wild Things Are” (ReLoad). Un pobre balance para las inquietudes del bueno de Jason.
Las premisas con las que fue concebido el contenido del ReLoad se mantienen con respecto a Load, ritmos lentos alejados del thrash visceral de otras épocas. El problema es que era una segunda dosis de la misma medicina que no había sentado nada bien a sus seguidores.
No es un trabajo malo pero la insistencia en repetir esquemas llega a resultar agobiante, así como en la excesiva duración. Quizá, si hubieran escogido lo mejor de ambos discos habrían facturado uno solo mucho más aprovechable a pesar del cambio de orientación musical.
EL CONTENIDO
No se puede discutir que ReLoad cuenta con sus momentos interesantes. El inicio con “Fuel” es espectacular. Aunque resulte paradójico, es una composición que con el tiempo ha pasado a formar parte de los temas más representativos por su resolutivo carisma y su pegadiza dinámica. Incluye un excelente solo de Kirk Hammet quien, se luce en otras piezas con sus intervenciones solistas, posiblemente, esa sea una de las virtudes de ReLoad, que pasa desapercibida por el negativismo con el que fue recibida esta etapa de Metallica.
“The Memory Remains”, mantiene un buen nivel, partiendo de la base contextual de ofrecer canciones densas, lentas y dotadas de cierta oscuridad. La colaboración de Marianne Faithfull, cantante y actriz británica, musa de The Rolling Stones y compañera de Mick Jagger durante años, le da un toque nostálgico.
“Devil’s Dance”, tampoco está mal; contiene un riff de aire misterioso y sigue envolviendo al disco en una aureola oscura. En cambio, la segunda parte de “The Unforgiven”, secuela de la compuesta en el Black Album es totalmente prescindible, sumergiendo al disco en un adverso sopor.
En “Better Than You”, dentro de la misma tónica general, Kirk Hammet nos ofrece otra eficaz muestra de sus habilidades solistas con influencias de grupos setenteros como los canadienses Triumph o los galeses Man, las mismas que podremos encontrar en el siguiente corte “Slither”, igualmente aprovechable con su persistente riff y sus decisivos fraseos solistas.
Continuando con el recorrido, “Carpe Diem Baby”, es otro de los temas menos inspirados y prescindible. Por suerte para los menos radicales y para quienes se amoldaron sin traumas a la nueva situación “Bad Seed”, es otro buen aporte, con marcada batería, riff pegadizo y solo interesante.
Con “Where The Wild Things Are”, retoman la senda de lo predecible con repetición de parámetros y duración excesiva. Lo mismo sucede con “Prince Charming”, a pesar de contener cierta filigrana guitarrera por parte de Kirk y un riff con la infaltable huella de James, así como su capacidad para construir letras con frases atractivas de fácil asimilación.
“Low Man’s Lyric”, también muy extenso y lento, no aporta demasiado y colocarlo en el tramo final del álbum resulta poco eficaz. Más dinámica es “Attitude”, con Lars marcando de forma precisa los tiempos mientras Kirk vuelve a exhibir sus estimables recursos, apoyado por un riff “marca de fábrica”.
La despedida es con “Fixxxer”, composición de más de 8 minutos de duración y en la que insisten en texturas ya expuestas reiteradamente sin que aporte algo llamativo
En conclusión, si nos ceñimos al contenido del álbum, obviando la trayectoria de Metallica hasta …And Justice For All, podríamos calificarlo de interesante y con cosas muy aprovechables, aunque menos efectivo que Load porque, si éste había resultado ciertamente polémico, ReLoad aumentaba la controversia al persistir en unas estructuras similares. Algo que estaba fuera del control de la banda ya que eran composiciones creadas en el mismo periodo y había que darles salida al mercado.
FICHA TECNICA
TITULO: ReLoad
AÑO: 1997
DISCOGRAFICA: Elektra Records
GRABACION: The Plant Studios (Sausalito) California
PRODUCCION: Bob Rock, junto a Hetfield y Ulrich
DURACION: 75,56 minutos
LISTA DE TEMAS: “Fuel”, “The Memory Remains”, “Devil’s Dance”, “The Unforgiven II”, “Better Than You”, “Slither”, “Carpe Diem Baby”, “Bad Seed”, “Where The Wild Things Are”, “Prince Charming”, “Low Man’s Lyric”, “Attitude”, “Fixxer”.
SINGLES: “The Memory Remains”, “The Unforgiven II”, “Fuel”.
POR LOCKY PEREZ
Metallica: Los álbumes malditos (II) — ReLoad2 thoughts on “”
excelente como siempre sigan asi