Tracklist:
01. Between The Lines
02. Take A Load Off
03. Huckleberry Crumble
04. Hickory Dichotomy
05. Dare If You Dare
06. Cinnamon
07. Hazy Daze
08. Bagman
09. Peacoat
10. Fast As I Can
11. First Kiss On Mars
12. Maver
Siempre he dicho que las reuniones de los grupos, como la vida misma, tienen dos caras. El lado luminoso es el de la gira en la que aquellos que no tuvieron la oportunidad de ver a la banda en directo en su momento, pueden satisfacer -en el mejor de los casos que hay de todo- sus húmedas aspiraciones.
Sin embargo, también hay un reverso tenebroso. Un lado oscuro, en forma de manzana tentadora, que es el de grabar nuevo material. Siempre he sido receloso a ello aunque, como en le caso de los ‘comebacks’ en directo, hay de todo y para todos los gustos.
Incluso teniendo en cuenta que 2010 tiene un marcado sabor a revival de los años 90’s, con Jane’s Addiction grabando nuevo disco; con Soundgarden de vuelta a los escenarios; con Courtney Love resucitando a Hole y aireando el fantasma de Kurt Cobain; con Alice in Chains girando y presentando material nuevo; hasta casi me parece lógico que Stone Temple Pilots hayan caído en la tentación de morder la manzana.
Una vez escuchado el álbum, se puede decir que han superado la prueba del algodón. Es un disco de buen nivel, lejos de las obras maestras de sus inicios, pero fieles a su concepción del hard rock. No pasará a la historia pero no creo que desagrade a la mayoría de sus antiguos fans. Además, no han engañado a nadie en las declaraciones previas. Weiland lo dejó muy claro: “es la natural progresión melódica de Stone Temple Pilots, con las armonías de The Beatles y canciones hard rock, llenas de solos“. Es lo que encontramos en los 12 cortes que componen este homónimo lanzamiento.
Porque es inevitable pensar en los Beatles cuando escuchamos los coros de “Hickory Dichotomy” o porque es imposible no acordarse del hard rock de los 70’s -o directamente de Aerosmith- cuando suena “Huckleberry Crumble” o “Hazy Daze“; o de Kurt Cobain en la inicial “Between the Lines“.
En el apartado melódico no sólo hay ecos ‘beatle’, Weiland también nos deleita con su versión más cercana a David Bowie, especialmente en “First Kiss on Mars” pero también en “Peacot” y “Bagman“. Y para los que les gusta la faceta más pausada y de distancias cortas de Stone Temple Pilots, quedarán satisfechos con escuchar la luminosidad de “Cinnamon” o la ternura que desprende “Maver“, el último corte del álbum.
Valoración: 7
Texto: Carlos A.S.
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