La persistencia del vocalista Trevor Strnad en seguir adelante con The Black Dahlia Murder a pesar de los numerosos cambios de formación habidos desde sus inicios en el año 2000, nos ofrece la posibilidad de disfrutar de su cuarto álbum, Deflorate, un trabajo que les ha permitido avanzar en su proceso evolutivo hacia una efectiva madurez.
Una vez más, la trayectoria de la formación de Michigan ha dejado por el camino a uno de sus miembros, en este caso el guitarrista Jon Kempainen, que ha sido sustituido por Ryan Knight (ex Arsis). Mientras tanto, se mantienen fijos Ryan “Bart” Williams (bajo) incorporado en 2005, Shannon Lucas (batería) quien se unió al grupo en 2007 procedente de All The Remains y el más veterano Brian Eschbach (guitarra), desde 2001.
The Black Dahlia Murder, siempre se ha destacado por apostar a las guitarras como vehículo principal para transmitir sus señas de identidad. Sin embargo, hasta ahora, las composiciones dependían en exceso de la brutalidad, mostrando argumentos algo recurrentes, sobretodo, si nos atenemos al contenido de su anterior álbum, Nocturnal, un disco virulento y explosivo pero cuyos esquemas redundaban en la parte rítmica. Con Deflorate, la presencia de Ryan ha permitido introducir desarrollos solistas mucho más variados creando un contraste revitalizador a la vez que atractivo a los oídos exigentes.
Con esta grabación The Black Dahlia Murder, ha conseguido traspasar el habitat natural de la música extrema y expandir su envenenado sonido hacia sectores menos habituados a aceptar las monstruosidades nacidas del underground. Es un mérito indiscutible y los motivos se escapan a las leyes de la razón porque sus esquemas son cualquier cosa menos comerciales.
Posiblemente, el secreto radique en incrustar esas guitarras de corte melódico en un contexto abrupto lo que provoca un contraste singular del que Deflorate está repleto de brillantes ejemplos como, “Black Valor”, “A Selección Unnatural”, “Denounced Disgraced”, “Throne Of Lunacy” o “Eyes Of Thousand”.
Y, lo más increíble es que, dentro de su extremismo, es un álbum que entra con facilidad a poco que se tenga cierta predisposición hacia los sonidos contundentes.
No está demás recordar que el nombre de la banda corresponde a un episodio oscuro de la historia de Estados Unidos, el asesinato sin resolver de Elizabeth Short, conocida como La Dalia Negra (llevado al cine hace unos años).
The Black Dahlia Murder, encabezarán el Bonecrusher Fest, que pasará por España a finales de enero y en el que estarán presentes cinco bandas más de orientaciones extremas.
CALIFICACION: 8
GRUPO: The Black Dahlia Murder
TITULO: Deflorate
DISCOGRAFICA: Metal Blade
AÑO: 2009
PAIS: Estados Unidos
CRITICA REALIZADA POR LOCKY PEREZ
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