Mucha atención con esta banda de Barcelona, que en su tercer trabajo, Visions of Oniria (Aloud Music) demuestra un gusto exquisito y tales buenas maneras que ese rollo Zeppelin que tienen tan marcado (sobre todo la voz y las melodías), se reinventa pareciendo que así sonarían en 2012 si se hubieran ido de farra con The Black Keys o The Raconteurs: “¡Pedazo disco El Camino! Sí, son referencias chulas de cosas que nos gustan. Somos seis tíos con gustos en ocasiones bastante distintos y con pasados musicales diversos. Gracias a ello, hemos confluido en este rollo 70’s de una forma muy cómoda y natural, supongo que todos hemos crecido escuchando grandes clásicos rockeros. Las recientes producciones de Jack White nos han gustado mucho, por ejemplo Roma con Danger Mouse, pero también nos ha llamado mucho la atención bandas como Metronomy, Late of the Pier, los primeros Soulwax con un peso importante de sintes, Arcade Fire, Band of Horses…”, dicen con entusiasmo.

Y es que lo mejor de las entrevistas es hablar de música. Personalmente, el giro que han dado es más que positivo, pues han bajado el pistón en el sonido, desmarcándose (afortunadamente) del palo Editors (Sometimes The Trigger o A Prison With Views), que era tan bailable y también a veces tan predecible… ellos mismos explican el cambio: “En el momento en el que se compuso el primer disco teníamos claramente otras influencias. Como bien dices, Editors era una de ellas, así como otros grupos que estaban sonando en aquel momento como The Kooks o The Sunshine Undergorund. Pero también cabe decir que nosotros queríamos llevar estas influencias a nuestro terreno y darles un toque más rockero y garajero. Ya con el Crows evolucionamos a otro terreno con la incorporación de los sintetizadores y con este nuevo disco hemos acabado de cerrar el círculo. También entran en juego pequeñas percusiones, theremins y todo aquello que nos parezca que pueda tener cabida en el complicado puzzle que acaban siendo nuestras composiciones”.

Es este disco hay dos vectores que mandan y determinan el resto. Los sueños y la soledad. Hay constantes referencias oníricas, sonámbulos, horizontes inalcanzables, visiones que a menudo hablan de lo más lejano, y más inalcanzable, las estrellas: “La Oniria es un viaje interior. A través de este viaje explicamos nuestra propia visión del mismo. Es un disco claramente introspectivo con el que nos dejamos llevar hasta encontrarnos a nosotros mismos y, de esta manera, darle forma a lo que es actualmente la banda. La soledad es el principio del existencialismo. Frente a la inmensidad del mundo de los sueños es fácil sentirse pequeño y solo. Aunque en cierta manera se trata de una soledad acompañada pues nos ha unido como banda y nos ha proporciona energía para darlo todo”. El día 11 de febrero The Last 3 Lines estarán en la sala El Sol y el 13 darán un acústico en Costello dentro del ciclo Subterráneo y como hasta ahora, a su aire: “Que estemos dentro o fuera de las tendencias nos trae bastante sin cuidado. Es bastante evidente que lo que hay aquí no sigue la línea que a menudo copa los carteles de muchos afamados festivales, pero creamos para satisfacer nuestro ego creativo, y compartirlo con los demás. Cualquier otra consideración es secundaria”.