Curioso el caso de esta banda, en la que se han unido unos pamploneses de distintos orígenes. La mitad de ellos británicos y la otra mitad navarros con algunos años de experiencia ya en bandas locales como Tomania y Sold Out. En su nota de prensa hablan de country, western y folk y lo cierto es que no hay mejor forma de describir su música, porque se hallan en un equilibrio perfecto entre la tradición norteamericana y el tono peliculero de las bandas sonoras más clásicas del cine del oeste.
Precisamente el toque cinematográfico de Morricone está presente desde el inicio, con Bernies Love Emporium y una de las mejores de todo el álbum Murder In The Harp, apoyadas magníficamente en el trabajo de las trompetas y cellos. The Waters Rage pone el punto pop y se acerca tremendamente a los primeros R.E.M y Spaceman vuelve un poco al folk, mientras que Caravinagre se queda en territorio de nadie aportando un tono más oscuro y Rumba de San Blas pone un extraño pero divertido final. Extraño porque ciertamente rechina escuchar las palabras en español con acento inglés, pero divertido porque es una de las composiciones más enérgicas, y se agradece después de tanto medio tiempo.
Moon Hole Bar es la primera muestra del trabajo de Hermano Lobo, pero está claro que no es el primero de sus músicos. Cada composición, la ejecución y enfoque demuestra que esta gente no son unos recién llegados y saben bastante bien lo que se traen entre manos. Como carta de presentación Moon Hole Bar es más que interesante pero eso sí, para la próxima entrega tendrán por delante el reto de mantener el nivel en un trabajo de más de veinte minutos.
Texto: Juan Manuel Vilches