Israel Nash Gripka (Foto: Marta Pérez) Country, brit pop, pop francés, punk rock. Un año más la variedad de estilos y popularidad es notable en una lista que no entiende de payolas, oldies o hipsterismos. A continuación los mejores conciertos internacionales de 2013 para el equipo de Musicópolis:
Como no podía ser de otra forma, “Fool’s Gold” y “Baltimore” dieron forma al bis de un concierto que le hace a uno presagiar que pronto la historia escribirá Nash junto a otros apellidos como Young, Fogerty, Adams o Earle. Por lo pronto nosotros escribimos la sentencia de que este fue uno de los mejores viajes del año y que la próxima vez que se pase por aquí procuraremos abrir los brazos un poco más si cabe.
Si es que con un líder tan carismático como Brett Anderson, se puede salir sobrado de alegría y fantástico agradecimiento ante la torrencial lluvia de pop que desgranaron. La victoria esta de su lado y de los que seguimos confiando en su poderoso directo.
Suede (Foto: Alfredo Rodríguez) Y apareció un Dominique A, enfundado en negro pero más luminoso que nunca. Nos cogió del corazón con los cinco dedos de los cinco miembros de su banda desde la primera a la última de las canciones de su excelente e impoluto repertorio; subió desde allí a la razón y con sus alas nos elevó hasta el cielo.
Siempre han sido y serán los embajadores de la felicidad y el buen rollo. Entre canción y canción el reverendo Manitoba sermonea a sus fieles con el mensaje del rock and roll y lleva en volandas a 350 personas hacia el éxtasis.
La viola y el violín que adornan las canciones de estudio, quedaron relegadas por la explosión nada intermitente de los temas en vivo, que obligaron sin remisión a la chavalería veinteañera que ocupaba las primeras filas a saltar con idéntico ímpetu que el que se escuchaba desde el escenario.
Dictators NYC (Foto: Alex García) Desde cualquier perspectiva, Amorphis dejaron constancia de sus aptitudes. Tras recordarnos que sus primeros álbumes también contenían temas atractivos como “Against Widows” y retomar su nuevo álbum con “The Wanderer”, para que Tomi pusiera de manifiesto sus cualidades melódicas, interpretaron una pieza de especial magnetismo como “My Kantele”, con Esa Holopainen dando la entrada con el punteo inicial y Santeri Kallio, aportando las sugerentes partes de teclados.
Lucinda estuvo tan cómoda en el escenario de la Joy como si se tratara del salón de su casa. Arropada por una audiencia solemne que sintió cada uno de sus versos y acordes, confirmando de nuevo que es la más grande y tiene lo que muy pocos poseen. Y es que, ante conciertos como este, uno sólo puede decir: gracias.
Su impecable trayectoria, tras 26 años de trayectoria y 11 álbumes de estudio en su haber, les han encumbrado como una de las bandas de metal extremo más relevantes del viejo continente y siguen defendiendo el escenario con furia titánica.
Lucinda Williams (Foto: Marta Pérez) Entrar en su mundo de disparos centelleantes de masas informes de colores mezclados por las paleta de su extensas canciones es adentrarte en un mundo extravagante de temas atípicos, por su duración, en un mundo que corre más veloz que la indiferencia sobre el resto se desprende de sus canciones.
En 2013 Def Leppard son una autentica banda, donde nadie hace la guerra por su cuenta y el resultado global supera con creces a la suma de sus partes, una auténtica lección de hard rock ochentero.
Gracias por vuestro apoyo, esperamos teneros de nuevo por aquí en 2014. ¡Felices año nuevo a todos!