Artista: Nashville Pussy
Disco: From Hell to Texas
Sello: SPV
Fecha de publicación: 04/03/2009
Más información: web/myspace
Listado de temas:
01. Speed Machine
02. From Hell To Texas
03. Drunk Driving Man
04. Lazy Jesus
05. I’m So High
06. Ain’t Your Business
07. Dead Men Can’t Get Drunk
08. Late Great USA
09. Pray For The Devil
10. Why Why Why
11. Stone Cold Down
12. Gimme A Hit Before I Go
Recientemente he leído una entrevista con Jorge Explosion, con motivo de la publicación del último larga duración de la formación asturiana Doctor Explosion, en la que reivindicaba el lado divertido del rock and roll en contraposición con el aburrimiento del rock. En estas declaraciones se mostraba crítico con la mercantilización del rock, con su vertiente ‘mainstream’, donde los discos se producen en exceso, y las bandas luego son incapaces de trasladar al directo estos megalómanos trabajos de estudio. Discos de productor, más que de banda. Ante tanto proyecto serio, pensado, elaborado, diseñado y, sobre todo, tedioso y aburrido, el cantante de Doctor Explosion reclamaba la recuperación del lado divertido y espontáneo del rock and roll. Nashville Pussy están en este mismo bando y han vuelto a demostrarlo con su último trabajo discográfico: From Hell to Texas [SPV, 2009].
La falta de grandes producciones, de sonidos limpios, o de productores de relumbrón, suele jugar en contra de grupos como Nashville Pussy y, en general, de los grupos frescos del rock and roll. No suelen gozar del favor popular, no acostumbran a gozar de espacios en los medios musicales generales, y, además, no gustan. La distorsión, el volumen, la actitud de unos tipos malencarados, ‘malafeitados’ y aficionados a la botella no se lleva desde hace tiempo, pero grupos como Nashville Pussy siguen en el candelero, divirtiendo a la afición en directo -como han demostrado hace poco en su gira junto con Supersuckers-, y sacando discos más que decentes en estudio.
From Hell to Texas es el quinto álbum en la carrera de Nashville Pussy y, en mi opinión, el mejor que han sacado desde 1998, año en el que salió publicado su demoledor disco de debut, Let Them Eat Pussy. Una docena de canciones sólidas, sin fisuras, entretenidas e ideales para comenzar el día con energía o bien para salir de farra, que de éso se habla, y mucho, en From Hell to Texas. Composiciones en la que hacen gala de ese atributo de ‘los Motörhead estadounidenses’ con el que les bautizó la prensa en sus primeros años. Un estilo Motörhead que es complementado por esa especie de Blackie Lawless sureño que es Blaine Cartwright. “Ain’t Your Business“, “Dead Men Can’t Get Drunk“, “Speed Machine“, “Late Great USA“, o el tema que da título al disco, son buenas muestras del estilo de la formación de Atlanta. Guitarras con mucho ritmo, de las que te llevaban a mover las caderas, e incluso los pies, que en momentos hacen guiños al hard rock y, en otros, al punk. Y, por supuesto, mucho sentido del humor en las alcohólicas letras del señor Cartwright, especialmente destacan la canchonda y sureña “Lazy Jesus“, que está completada con unos marchosos coros femeninos, y “Why Why Why“.
Valoración: 70
Texto: Carlos Ayllón