Segundo trabajo de una de esas bandas que tienes que escuchar una y otra vez para cerciorarte de que son españoles. No vamos a negar que nuestro país ha tenido y tiene unas cuantas formaciones que han dado muy buenos discos para la música de nuestro terruño, pero tampoco nos engañemos, discos como este son muy poco habituales.

Un breve repaso a la historia de estos tipos nos lleva a un primer lanzamiento titulado Angel Road, un EP de seis temas —o mejor temazos- publicado en 2011 que tuvo el gran acierto de dejarnos con ganas de más. Pues bien, ya tenemos aquí la continuación y en este Pheromones & Flu lo primero que nos encontramos en que la formación ha quedado como trío después de la marcha del vocalista, haciendo cargo ahora de las voces el bajista y el guitarrista.

Haya sido o no por este cambio su sonido es ahora mucho más cercano a las grandes bandas del rock escandinavo de los 90 y han dejado un poco atrás el tono más setentero de su primer trabajo y esta nueva dirección les ha sentado tremendamente bien. Ya desde el arrollador comienzo con Back In Town y el tema que da título al álbum nos encontramos ante un disco frenético, con una enorme energía y que destila actitud por los cuatro costados. Sin embargo, seguimos encontrando algunos retazos de sus orígenes en temas como Insane o la bárbara Dream In A Pot, que sigue muy de cerca lo que vienen haciendo desde hace algunos años gente como Clutch y similares.

Pheromones & Flu es un magnífico motivo para que quienes anden en otros lugares vuelvan a mirar la escena nacional. Apenas media hora de grandes canciones, sin infructuosas búsquedas en pos de nuevos sonidos y con unos tipos cargados de fuerza y ganas de hacer música. The Inductions aseguran con este disco la reputación que ganaron con su primer EP y ahora sólo nos queda esperar a que algún avispado promotor les monte una buena gira.

Texto: Juan Manuel Vilches