Zenet — La Menor Explicación (El Volcán, 2012)

El misterio de un sombrero tapa con su sombra la cara de Toni Zenet en la portada de su último disco, La Menor Explicación. La imagen permite escapar el filo de su nariz, la curvatura de unos labios que se intuyen, que buscan salir a la luz. Bajo las grandes cinco letras de su apellido, y duplicada, otra fotografía suya de la misma sesión, solamente que ahora es el ala del sombrero la que impera y oscurece la imagen. Mirando estas fotos de izquierda a derecha, pareciese que el artista nos quiere llevar a su terreno, a la intimidad del tú y yo, al secreto de los amantes.

Zenet, el crooner malagueño que con el CD Los Mares De China (2008) tanto debutó como se llevó a su casa el Premio De La Música al Mejor Artista Revelación, tiene en La Menor Explicación un campo de juego por el que acercarse a la sonoridad del titánico a la par que sutil guitarrista desaparecido de swing-jazz Jean Baptiste “Django” Reinhardt (‘Cómo Será‘) o al tanguito suave, sin estrépitos, que pareciese querer danzar de punta a tacón con una bossa pincelada muy de fondo, como si la atmósfera de los arreglos no quisiese olvidar ni a uno ni a otro —sabiéndose la curva argentina del fraseo ganadora por imperar en el resultado final—. ‘Sé Que Estás Pensando En Mí‘ rememora el estilo al violín de Stéphane Grappelli y uno quiere ver en el trasfondo a aquel Quintette du Hot Club de France.

Es por tanto La Menor Explicación una cita para melómanos —las instrumentaciones grabadas, igualmente si encuadran el jazz, el swing y las demás disciplinas, suenan de cinco estrellas— y románticos empedernidos, de los que se subyugan tanto con el desamor como con los finales de sábanas revueltas. Zenet ha entendido a la perfección lo que significa en el fondo y en la forma la palabra crooner, al contrario que muchos otros oportunistas contemporáneos que se perdieron meramente engolando la voz.

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Sergio Guillén